La espera no ha sido larga. PlayerUnknown’s BattleGround, también conocido como PUBG ya está disponible para descargar y jugar en móviles. El título tantas veces imitado durante los últimos meses ya cuenta con su propio port o adaptación a la plataforma móvil, y promete ofrecer muchas horas de vicio y diversión a quienes disfruten de los Battle Royale o todos contra todos. Un juego que va a dar mucho de qué hablar en los próximos meses.
Se trata de la adaptación para móviles del juego de mismo título ya visto en videoconsolas y ordenadores. La diferencia, además de la plataforma, es que llega de forma gratuita. Tanto para Android como para iPhone. No hay que pagar nada para hacerse con él ni para disfrutar de la experiencia. Y lo que es mejor, replica la jugabilidad y casi los gráficos de forma fidedigna para jugar en cualquier lugar. O casi, porque más vale que uses tu conexión a Internet más ágil si no quieres morir a manos del enemigo o del lag.
El juego que todo el mundo conoce
Si estás buscando el Battle Royale que ha triunfado durante todo el 2017, enhorabuena, ya ha llegado. Y es que la adaptación del título no tiene nada que envidiar al juego de ordenador. Al menos en cuanto a mecánicas se refiere. Volvemos a encontrarnos ante un juego en el que la supervivencia es clave.
La acción comienza en un avión (tras unos minutos de espera para reunir al grupo total compuesto por hasta 100 jugadores de todo el mundo), saltando sobre un mapeado gigantesco en paracaídas. Al llegar al suelo vemos cómo el terreno está desierto, aunque con edificios y vehículos por doquier. Y lo que es más interesante, con armas y equipamiento para armarse hasta los dientes y sumar posibilidades de victoria.
Al final solo puede quedar uno. Una presión que lleva a todo el grupo a una especie de Juegos del hambre en los que acabar con todo lo que te cruzas. Eso sí, el juego cuenta con modalidades de equipos de dos y squads de 4 personas.
Para amenizar la partida, además de asegurarse de que los jugadores vuelven, la versión móvil de PUBG también cuenta con eventos y misiones. Pequeños objetivos que se pueden llevar a cabo dentro de la experiencia principal y que suman dinero, experiencia y objetos para el jugador.
Jugabilidad personalizable
Es el aspecto más problemático en la plataforma móvil, y es que usar controles digitales en la misma pantalla en la que tienes que fijar la vista es algo complejo. No nos sorprende la jugabilidad por defecto de PUBG, que es prácticamente idéntica a la de Rules of Survival, el juego con el que habíamos suplido su espera. Un control a la izquierda para el movimiento del personaje (con la opción de bloquear la carrera si arrastramos el dedo lo suficiente), botones para acciones como agacharse, tumbarse y saltar, y otro para disparar. Mientras, deslizar el dedo por la pantalla permite girar la vista y encuadrar allá donde se quiera mirar. Puede ser abrumador para el jugador inicial, pero es la forma más completa y menos abusiva de llenar la pantalla de botones sin ocultar la acción.
Lo bueno es que podemos pasarnos por los ajustes y modificar estos controles. Podemos unificar el movimiento de la cámara y el botón de disparo. O incluso hacer más libre el movimiento ofreciendo toda la mitad izquierda de la pantalla para poder controlar el personaje. Elementos que ayudan a personalizar la experiencia para que no sea tan difícil pegar tiros y moverse por el mapeado de forma fluida.
Las distancias largas rompen los gráficos
En el aspecto gráfico el juego cumple con lo que se espera. No deja de ser un juego para móviles, señoras y señores. Eso sí, contamos con reflejo, un buen modelado de los personajes, detalles y sombras aquí y allá. Pero necesitamos un móvil actual de gama alta para evitar parones y conseguir disfrutar de todos estos efectos. Aunque se queda lejos de otros títulos móviles.
De todos modos, PUBG para móviles cuenta con opciones gráficas en el apartado de ajustes para quienes poseen móviles menos potentes. Así, podemos sacrificar cuestiones como las sombras o la resolución de las texturas para asegurar que el juego corre de forma fluida. A cambio el aspecto visual final será más pobre y menos detallado, pero la experiencia será mucho más satisfactoria.
Lo que nos ha gustado menos en nuestra prueba es que la distancia de dibujado, la distancia a la que empiezan a verse los objetos en el mapa, es bastante corta. Esto crea situaciones como que el mapa vaya apareciendo a trompicones cuando descendemos desde el avión. O que tengamos que avanzar para saber si lo que hay encima de la siguiente colina es una casa. Cuestiones que, durante la acción, pasan desapercibidos, pero que rompe ligeramente la experiencia. Un precio que hay que pagar al tener en cuenta el tamaño del mapa, que ha de ser cargado por partes.
Experiencia sin lag
No nos atrevemos a poner la mano en el fuego, pero nuestras primeras partidas desde el móvil han sido más que satisfactorias. Eso sí, siempre conectados a una buena conexión WiFi con velocidad de 50 MB por fibra óptica. Con estas condiciones y un Samsung Galaxy S9+ como plataforma de juego, el lag o la latencia prácticamente ha brillado por su ausencia. Nada de parones, nada de muertes que no sabemos por qué suceden hasta que pasan unos segundos o de movimientos a trompicones del juego o del resto de jugadores que lo habitan. A pesar de ser un título online con 100 participantes, la experiencia móvil es satisfactoria. La hemos disfrutado sin problemas.
Ahora bien, en nuestro recuerdo está aún el gran y querido Slither.io, que fue víctima de su propio éxito con una jugabilidad que la latencia acababa empañando. Es posible que, dentro de unos días, cuando todo el mundo se haga eco de la llegada de PUBG a móviles, el título no vaya tan fluido.
De momento podemos elegir entre servidores en caso de que el europeo que llega por defecto esté saturado o funcione mal. Pero habrá que ver si los desarrolladores del juego tienen esta cuestión en mente y han puesto medidas ante lo que, presumiblemente, se les viene encima.
El mejor Battle Royale por el momento
No cabe duda de que Tencent Games ha hecho una buena adaptación. Y ha acertado siendo el primero que ha llevado un juego Battle Royale famoso a los móviles. Aunque tampoco nos olvidamos de que Epic Games también está preparando la adaptación de Fortnite para estos dispositivos.
Ahora solo queda ver cuál de los dos juegos gana la guerra. Mientras que PUBG ha sido el primero en llegar y contar con cierto renombre, las masas apuestan últimamente por Fortnite. De momento, todo aquel que quiera puede iniciarse en el mundillo de los Battle Royale con PUBG de forma libre y bien adaptada.
