Ya ha llegado una de las funciones más interesantes de Clash Royale. Se trata de las Batallas de Clanes. Un nuevo modo de juego en el la que unir fuerzas con un compañero de clan en una arena de batalla. Un dobles, que se diría en tenis. Una partida dos contra dos en el que la sincronía, la experiencia y la diversión son la clave para ganar. Y es que no resulta tan fácil ponerse de acuerdo con un compañero en el campo de batalla.
Hasta ahora, los clanes de Clash Royale tenían como máxima interacción el Cofre del Clan. Una recompensa que se consigue con solo sumar coronas por parte de todos los miembros del grupo. Sin embargo, cada jugador combate en solitario y por su cuenta y riesgo. Ahora, en las Batallas de Clanes es posible arrimar el hombro y combatir en pareja, a la vez y contra el mismo enemigo.
Cómo participar en las Batallas de Clanes
Las Batallas de Clanes se alternan ahora con los Cofres del Clan semana a semana. Cuando sea el turno de una de estas batallas, el chat del clan servirá de acceso a dicho evento. Así, solo queda plantear una Batalla de Clan directamente en la conversación, publicando una invitación para que cualquiera de los compañeros la acepte y se una a la batalla. Básicamente, como ya funcionan las batallas amistosas del clan.
Eso sí, la diferencia es notable, ya que la partida no comienza hasta que un aliado se suma. Además, no es solo contra un enemigo, sino contra dos. La arena se transforma para dar cabida a dos Torres del Rey y dos Torres de Arena en un bando, y lo mismo en el otro. A partir de aquí la suerte está echada, y es que hay que coordinarse muy bien para no malgastar elixir y oportunidades entre los dos aliados.
Las Batallas
Durante la batalla, cada jugador cuenta con su propia barra de elixir y con su propia baraja. Algo que ayuda notablemente a que las cosas vayan bien, pero no del todo. Antes de empezar el combate, además, es posible ver en pantalla cuál es la baraja de nuestro compañero. Esto es una sencilla ayuda para empezar a planear cada estrategia y movimiento. Y es que, sabiendo que cartas va a utilizar el aliado, es más sencillo desarrollar un plan de ataque que no doble esfuerzos inútiles o que complemente su ataque.
También resulta interesante ver en todo momento los movimientos del aliado sobre la arena. Esto es, poder ver dónde desplegará la carta elegida en cada momento. Una silueta marca el lugar y la carta elegida, dándonos algo de tiempo para amoldarnos a su estrategia. O para dictar cuál va a ser nuestro próximo paso, si somos los primeros en lanzar carta sobre la arena.
Hay que tener en cuenta que, aunque se cuente con dos Torres del Rey, ambas comparten la misma barra de vida. Así, la partida acaba cuando este castillo es derrotado. Claro que, atendiendo a la presencia de dos jugadores, lo más probable es que sea el tiempo quien decida la victoria y la derrota de uno u otro equipo.
Claves
La coordinación y posible comunicación con el aliado es clave en estas Batallas de Clanes. Y es que resulta realmente complejo llevar a cabo una estrategia exitosa si no se aprovechan las fuerzas, cartas y conocimientos del aliado. Utilizar herramientas como Discard u otras plataformas de mensajería y llamadas puede ser la clave.
También hay que tener en cuenta que las Batallas de Clanes toman los valores de los torneos. Así que las cosas quedan bastante equilibradas gracias al nivel máximo que alcanzan las cartas y construcciones durante la partida. La cosa queda así:
- Nivel máximo de Torre del Rey: 9
- Nivel máximo de las cartas comunes: 9
- Nivel máximo de las cartas especiales: 7
- Nivel máximo de las cartas épicas: 4
- Nivel máximo de las cartas legendarias: 1
- Tiempo extra: 3 minutos
Con ello en mente, el equilibrio no es tan importante como contar con un par de barajas bien empastadas. Y es que es mejor poder compenetrarse con el aliado y asistirlo por el aire si él solo cuenta con cartas de tierra. O llevar a cabo una estrategia defensiva mientras que el otro se encarga del ataque, por ejemplo. Todo ello adaptándose siempre a cada situación y enemigo. El mejor nivel de cartas posible es lo ideal, pero no es lo más importante.
Otro punto a destacar es el nuevo carácter de las cartas de efectos como los hechizos. Y es que mantienen su radio de acción a pesar de que pueden ofrecer sus efectos al doble de tropas. Con el mismo coste de elixir, permiten acelerar a las tropas propias y del aliado, envenenar a todos los enemigos o llevar a cabo otras acciones por partida doble. Todo ello sin gastar más elixir y sin reducir su radio de acción en ningún momento.
Problemas de comunicación
Contar con el doble de jugadores, de elixir y de cartas en la misma arena es contar con el doble de diversión. Y es que las Batallas de Clanes son un giro de lo más interesante a la experiencia de Clash Royale. Además, se pueden disfrutar más allá de conseguir los cofres y recompensas que ofrece esta mecánica. Y, una vez abiertos los cofres, si el evento sigue disponible, es posible seguir combatiendo junto a aliados.
El verdadero problema reside en la falta de comunicación. Como decíamos, es importante tener alguna vía de contacto directo con el aliado. O, al menos, planificar cuál será la estrategia general antes de empezar a soltar cartas.
Es posible que se den situaciones nefastas en estas partidas. Malgastar 12 puntos de elixir al tirar dos cohetes para acabar con la misma tropa de unidades enemigas, por ejemplo. Todo ello por no fijarse en el lanzamiento previo del aliado o por no centrarse en una estrategia individual pero complementaria. En cualquier caso, estas situaciones hacen que las Batallas de Clanes sean una auténtica locura y ofrezcan mucha más diversión que los combates al uso.
