Tras cinco años de andanza en los que la fama llegó en gran parte por el contenido sexual, a nadie le debería sorprender este titular. Y es que Snapchat ha sido la aplicación estrella para practicar sexting o el envío de fotos y vídeos pornográficos. Al fin y al cabo, estos se autodestruían a los pocos segundos. Sin embargo, lo sorprendente de esta historia es que Snapchat ha sido denunciada por incluir contenido sexual directamente en su sección Discover, donde cualquier menor puede acceder para conocer noticias de videojuegos, celebridades o deportes, y encontrarse con personajes de Disney practicando sexo, supuestamente. Justo lo que ha sucedido recientemente en California, Estados Unidos.
Es por ello que una madre y un niño de 14 años han decidido denunciar a Snapchat por no filtrar los contenidos de su sección Discover. Y es que el menor pudo ver diferentes artículos con contenidos sexuales, aunque sin contar con imágenes explícitas. Algo que podría atentar directamente contra la ley de Decencia en las Comunicaciones del Estado de California.
Fue el canal BuzzFeed quien no dudó en usar fotogramas de películas de Disney para representar escenas y situaciones típicamente sexuales. A ello, la demanda suma otros artículos como 10 cosas que él piensa cuando no puede conseguirte un orgasmo, Me drogaron, mamaron y robaron cuando erra repartidor de pizza o Gente revela sus reglas secretas para el sexo, entre otros contenidos más que se distribuyeron directamente a través de varios canales de esta sección accesible para menores.
La demanda, que aspira a convertirse en colectiva, busca una sanción civil (recompensa económica), así como la introducción de alertas dentro de la aplicación que avisen sobre el contenido no recomendado para menores de edad. Una especie de control parental que pueda evitar que los más pequeños se enfrenten a contenidos sexuales, sin coartar la libertad de los adultos a usar Snapchat y disfrutar de todo lo que se publica en sus canales de Discover.
Por su parte, Snapchat afirma a varios medios estadounidenses no haber recibido aún información sobre la demanda, aunque aseguran sentirlo si han ofendido a alguien. “Nuestros socios de Discover tienen independencia editorial, algo que apoyamos”, confirman vía correo electrónico a The Verge. Eso sí, tal y como se hacen eco en dicho medio, Snapchat suele guiar y atender al aspecto y enfoque de los contenidos que las diferentes publicaciones comparten dentro de la aplicación de mensajería efímera.
A pesar de que Snapchat está recomendada para mayores de 12 años en la tienda de aplicaciones App Store, sus términos de uso alertan de la necesidad de tener 13 años o más debido a los contenidos que pueden encontrarse en su interior. Algo que no parece suficiente para esta madre californiana y su hijo de 14 años, para quienes lo ideal sería incluir mensajes de alerta para menores y algún tipo de control parental.
El contenido sexual, ya sea explícito o no, parece formar parte del ADN de Snapchat. Una aplicación donde compartir fotos pornográficas que se autodestuyen parece haber sido la clave de su fama. Claro que también es un foco de preocupación para los padres cuando el grueso de los usuarios de esta herramienta son menores. Una lucha en la que Snapchat, o la justicia estadounidense, tendrán que tomar medidas.