La aplicación de citas Tinder sigue creciendo de forma imparable. Y es que no sólo es más conocida cada día que pasa, sino que plantea nuevas metas y opciones para satisfacer la necesidad de encontrar pareja a sus usuarios. Quizá con ello en mente, o evitando tener un nuevo competidor en frente, ha sacado la cartera a paser para hacerse con Chill, una compañía encargada del desarrollo de Tappy, otra curiosa y prometedora aplicación de mensajería.
Por el momento no han trascendido los datos de la operación, tan sólo se ha confirmado el cierre de la adquisición, tal y como publica el medio TechCrunch. Así se lleva a cabo la primera compra por parte de la aplicación para ligar más famosa del momento, la cual mantiene un crecimiento lento pero imparable. De hecho, su CEO (director ejecutivo), Sean Rad, dice estar contratando sin parar, buscando el talento que case con el momento actual de esta compañía de citas en cuyo camino parece haberse cruzado Tappy.
La aplicación Tappy supone una curiosa propuesta al sobresaturado mundo de las herramientas de mensajería. Se trata de una aplicación sencilla y muy ágil para mantener conversaciones individuales o grupales a partir de una fotografía y de forma efímera. Algo muy similar a Snapchat, pero con un planteamiento propio. Así, basta con tomar o compartir una imagen que sea el propio trasfondo de la conversación. Sobre ella comienzan a intercambiarse los mensajes de los usuarios. Todo ello desde una aplicación que parece tener un muro más que una pantalla de chats gracias a estas imágenes que son razón y decoración de las conversaciones. Y que borra sus contenidos tras 24 horas.
Algo que también se parece mucho a los momentos Tinder. Una de las últimas características añadidas a esta aplicación para ligar que permite publicar fotos decoradas por el usuario para que sean vistas por todos sus encuentros. De esta forma puede mostrar lo que está haciendo, un selfie, dónde estᔦ Información que puede generar interés a sus ligues para plantear nuevas charlas o, simplemente, dejarse ver. Una característica que podía cobrar nuevos matices si el equipo de Tappy aporta su experiencia y conocimientos sobre la mensajería.
Además, podría ser una buena forma de evitar a un competidor que, si bien no se enfoca al ámbito de las citas, sí supone una opción novedosa o una alternativa bien diferenciada respecto al reto de aplicaciones disponibles en cuanto a mensajería. O quizá, un paso hacia una nueva etapa en la que plantear nuevas posibilidades de comunicación en Tinder. De momento sólo se sabe que ambas compañías se congratulan por la adquisición, afirmando que son compañías de gran crecimiento y que miran en la misma dirección.
Habrá que esperar para ver qué sucede con Tappy y si Tinder decide aprovechar su talento para mejorar sus opciones. Por ahora sólo se trata de una demostración del crecimiento que esta herramienta de ligues está consiguiendo. Algo que no sólo se traduce en un mayor número de usuarios, sino también en inversiones millonarias y nuevas rutas que, según su CEO, se tomarán durante este 2015. Estaremos atentos.