A pesar de que la aplicación de comunicación Viber debería estar en uno de sus momentos más dulces después de ser adquirida por el gigante de las compras en Internet Rakuten, nuevas sombras planean sobre su cabeza. Problemas que, desafortunadamente, no son la primera vez salpican a esta aplicación y, más concretamente, a sus usuarios, cuya privacidad podría estar en peligro si no se modifican y protegen los canales por los que Viber envía la información de las conversaciones.
En esta ocasión ha sido la Universidad New Heaven de Connecticut, EEUU, quien ha descubierto nuevos fallos de seguridad. Cuestiones que, como ya habían descubierto unos investigadores españoles, se centran en la falta de encriptación de los mensajes que los usuarios de esta herramienta se intercambian entre ellos. Sin embargo, a eso hay que sumar la falta de un protocolo de autentificación en los servidores de la aplicación y al almacenamiento que en ellos se hace de la información de los usuarios. Puntos que pueden acarrear importantes consecuencias poniendo en jaque tanto la privacidad como la seguridad del usuario.
De esta forma, cualquier información enviada a través Viber podría ser interceptada y leída sin dificultad por terceros. Eso sí, siempre y cuando se cuente con los conocimientos y herramientas necesarios. Pero ello supone poder acceder a la información de los mensajes, conocer las fotos que se intercambian, los vídeos e incluso la ubicación. Detalles que a más de un usuario le pondría los pelos de punta. Y es que parecen problemas de principiante.
Pero lo realmente destacable es que los investigadores de esta universidad también han encontrado otros problemas relacionados con los servidores de la aplicación. Es decir, los ordenadores y vías por los que circula la información de los usuarios. Así, se ha conocido que no existe autentificación, permitiendo que hackers y terceros puedan acceder a ellos para captar toda la información y poder hacer otras fechorías. Y aún más, en vez de eliminar la información que pasa por estos puntos hasta sus destinatarios, queda almacenada en ellos. Algo que da más posibilidades a los intrusos para hacerse con toda clase de datos y detalles de los usuarios.
Al parecer, Viber ya está trabajando en solucionar estas cuestiones en unas actualizaciones que están por llegar a Android e iOS, las principales plataformas. Sin embargo existe la duda de qué sucederá mientras tanto con el resto de usuarios. Según el medio PhoneArena, la compañía de la aplicación afirma no haber sido alertada por ningún usuario que haya sido afectado por alguna de estas vulnerabilidades o problemas.
Sin duda, un problema muy a tener en cuenta, más aún tras los escándalos de espionaje, pero también por la protección de los propios usuarios, cuya intimidad puede quedar al descubierto. Por el momento lo más recomendable es no enviar información sensible a través de esta herramienta hasta que las nuevas actualizaciones lleguen y se compruebe que son totalmente seguras para el envío de mensajes, dibujos, fotos o la ubicación.