Que las aplicaciones de mensajería están en auge es algo que ha quedado demostrado a lo largo de todo el pasado 2013. Un género que sigue sumando éxitos gracias a las diferentes alternativas que existen. Un buen ejemplo de originalidad es Rithm, un servicio de mensajería centrado en la música que ya consiguió llamar la atención tras su salida en iPhone y que ahora, meses después, llega a la plataforma Android.
Se trata de una aplicación centrada en la musicalidad. Y es que no aporta nada realmente nuevo respecto a la posibilidad de enviar canciones por WhatsApp, pero sorprende por su concepto en sí mismo, además de su diseño visual. Con ella es posible enviar porciones de canciones acompañadas de otros elementos como fotos, vídeos, stickers animados o texto, pero siempre centrada en la música como elemento base. Una buena excusa para dar a conocer canciones o despertar otras sensaciones más allá del clásico mensaje de texto.
Su uso en la plataforma Android respeta las líneas ya vistas en iPhone. Una herramienta muy sencilla que sólo requiere la creación de una cuenta de usuario nueva o utilizando la de la red social Facebook o Twitter para agilizar el proceso. Además, utilizando estas redes también se facilita la posibilidad de encontrar contactos o amigos que también dispongan de Rithm para enviarles toda clase de mensajes musicales. Una vez completado este paso ya es posible comenzar a utilizar la aplicación.
Rithm actúa casi como si de una red social se tratase. De esta forma cuenta con una pantalla principal a modo de muro donde ver las canciones y mensajes enviados por los usuarios agregados, siempre y cuando estos mensajes se marquen para compartir a la hora de enviar. Para comenzar con un mensaje sólo hay que pulsar en la esquina superior derecha. Esto abre una nueva pantalla donde escoger según diferentes estilos, criterios y selecciones entre una amplia y actualizada colección de música. Aunque, si se prefiere, es posible utilizar la barra de búsqueda para encontrar un álbum, canción o artista concreto.
Tras ello se muestra la pantalla de edición del mensaje. Un disco representa la música, pero existen otros elementos en la barra inferior para acompañar el mensaje. Puede ser una imagen tomada con la cámara en ese mismo instante y retocada con líneas y colores por el usuario, un vídeo de unos cuantos segundos o un divertido bailarín. Una especie de stickers o emoticonos animados que bailan al ritmo de la canción. Tras ello sólo que da escoger el destinatario del mensaje, escribir unas palabras y seleccionar si se quiere publicar para que otros usuarios de Rithm lo puedan ver también.
Con ello el interlocutor o receptor del mensaje recibe una alerta (si dispone de la aplicación) o un enlace por mensaje de texto. Así puede acceder al contenido, escuchar la canción, leer el mensaje, dar a me gusta e incluso comentarlo. En definitiva, una aplicación curiosa que da una vuelta de tuerca al concepto de la mensajería y que ya está disponible en la plataforma Android. Lo mejor es que se puede descargar gratis desde Google Play.