En Instagram están dispuestos a acabar con Snapchat a cualquier precio, incluso cuando se les acuse de falta de originalidad. Si bien es cierto que están haciendo un buen trabajo, es más que notable que las Historias de Instagram son una copia descarada de las Historias de Snapchat. Tras ello también han decidido copiar su sistema de mensajería efímera. E incluso han modificado el diseño de la aplicación, recordando a Snapchat a la hora de tomar un snap para poder compartirlo después por privado con un usuario o de forma pública en las mencionadas historias. Ahora parece que también van a por las notificaciones de captura de pantalla. Un paso lógico para alertar sobre la privacidad de lo que se comparte en esta red social de fotografía.
Y es que varios usuarios en Twitter han comenzado a compartir una nueva notificación que les ha aparecido eventualmente en sus iPhone. En ella se alerta al usuario de que un contacto de Instagram ha realizado una captura de pantalla de uno de sus momentos compartidos de forma privada. Es decir, de una foto o vídeo compartido con él en su propio chat individual. Algo que ya estaba en Snapchat desde sus orígenes.
No nos olvidamos que Snapchat llamó la atención en un inicio por su aplicación práctica para el sexting o intercambio de fotografías subidas de tono. Y es que éstas desaparecían a los pocos segundos de ser enviadas. Además, si el receptor se pasaba de listo y tomaba una captura, un mensaje de alerta se lo hacía saber a quien tomó la instantánea. Pues bien, ahora se puede hacer lo mismo en Instagram. Ya sea con fotos pornográficas o inocentes selfies.
Eso sí, de momento parece una función en fase de pruebas. Más concretamente, pruebas en la plataforma iOS. La sencilla notificación no impide en ningún momento la toma de la captura de pantalla, pero al menos informa al emisor sobre la posible vulneración de su privacidad. Y es que se entiende que este sistema de mensajería efímero está hecho, precisamente, para que nada dure. Sin embargo, una fotografía de la pantalla del móvil arruina toda esta experiencia.
De momento la polémica está servida, y ya hay quien amenaza con dejar la aplicación. Ahora bien, hay que tener en cuenta que de momento es una prueba muy limitada, aunque todo apunta a que próximamente también llegará a Android y, si todo va bien, se extenderá a todos los usuarios para mejorar la privacidad del servicio. Esta alerta no detendrá a nadie de tomar una captura de pantalla de aquello que realmente le interesa y quiere dejar perpetuidad, pero demostrará a muchos usuarios en quién sí y en quién no pueden confiar.
Snapchat, por su parte, sigue distribuyendo máquinas de autoventa de Spectacles, sus gafas para tomar snaps durante la marcha. Un concepto que de momento sigue limitado a Norteamérica y con el que están tratando de preservar su presencia ante los embistes y la poca creatividad de Facebook, propietaria de Instagram.
