Los padres de hoy en día tienen nuevos retos que asumir por culpa de las redes sociales. Y es que hace unos cuantos años no había que preocuparse demasiado por si los hijos subían fotos de contenido comprometido o incluso sexual a plataformas como Fotolog, por ejemplo. Ahora, Instagram o Snapchat ponen en jaque la paciencia de unos y la privacidad de otros. Es por ello que lo mejor, quizá, sea educar a los más pequeños en el uso de estas redes sociales. Algo que no opina el padre de esta historia, que ha decidido parodiar a su propia hija en su cuenta de la red social de fotografía.
Se trata de Burr Martin, un comediante y cosplayer (creador de disfraces) que ha decidido saltarse la diplomacia con su hija y, directamente, parodiarla. De esta forma, en el Instagram del padre, han comenzado a aparecer fotomontajes en los que Martin imita a su hija en tono cómico y casi ridículo. Tal y como explica en algunas de las descripciones de estas fotos, ha decidido dejar de intentar que su hija publique ese tipo de instantáneas sexy, y ha pasado a la acción. Todo ello con el claro objetivo de avergonzar a su retoño, aunque ello solo le haya acarreado más éxito tanto al padre como a la hija.
A pesar de su afición a la creación de disfraces de héroes y películas de ciencia ficción, la cual también muestra en su cuenta de Instagram, Burr Martin no se trabaja tanto las poses en las que se ríe de su hija. De esta forma encontramos imitaciones pobres. Pero tan pobres que resultan ridículas. Y tan ridículas que es inevitable reírse de lo absurdo de la situación.
Si no tiene los mismos tatuajes que su hija, no hay problema: se los pinta. Si no sabe cómo maquillarse los ojos con efecto ahumado, lo intenta pintándose un gran triángulo negro junto al ojo. Si no tiene un top sexy y provocativo”¦ bueno, mejor lo veis en las imágenes”¦ Y es que este hombre no tiene vergí¼enza ninguna cuando se trata de castigar socialmente a su hija para evitar que siga publicando el mismo tipo de fotos.
Ahora bien, dudamos que haya conseguido la misión que buscaba. Más aún cuando Martin no duda en publicitar la cuenta de Instagram de su hija en su propio perfil. Claro está que a ella le debe su fama. Un dúo que ha conseguido el éxito gracias a lo ridículo de las fotos publicadas. Un padre del que no se sabe si ha ganado la batalla sobre el respeto a uno mismo que parece lidiar con su hija, pero que a buen seguro les ha supuesto toda una lluvia de me gusta y nuevos seguidores en Instagram.
¿Hasta dónde hay que llegar como padres en las redes sociales? ¿Cómo se evitan los casos de hijos demasiado libres con su cuerpo? De momento es una nueva lucha que los padres deben enfrentar con sus hijos. Burr Martin lo hace a su propia manera.