Ya están de vuelta los pájaros cabreados. Esos simpáticos personajes que nos hicieron perder horas y horas delante de la pantalla del móvil han aterrizado en Android e iOS con una misión: reeditar el éxito de la primera entrega. Y las primeras noticias que nos llegan desde Rovio son positivas. En solo dos semanas, se han descargado el juego 30 millones de usuarios, una cifra que deja a las claras las ganas que teníamos de una nueva versión de este juego adictivo. Pero, ¿qué es lo que nos ofrece de nuevo este título? ¿A qué dilemas nos enfrentarán los malvados cerdos? Te traemos las cinco principales diferencias entre Angry Birds 2 y el primer Angry Birds.
1. El sistema de vidas
O sería mejor decir, el polémico sistema de vidas. Los usuarios comienzan el juego con cinco vidas. Eso significa que cuando vayamos fallando en los niveles iremos perdiendo vidas hasta quedarnos a cero. Hay dos formas de recuperar las vidas. Por un lado, esperando un tiempo a que se recarguen. Y por el otro, comprando nuevas gemas con dinero real (o usando las que hemos ido acumulando al pasar niveles). Se trata de un método que funcionó muy bien en Candy Crush Saga para conseguir monetizar el juego pero que rompe con las horas de diversión seguidas que nos podíamos tirar para pasar un nivel. Eso sí, por el lado positivo le suma un componente más competitivo que nos hará pensar mucho cada lanzamiento.
2. Una estética más cuidada
Si Angry Birds ya era muy divertido y con unos gráficos simpáticos, Angry Birds 2 se lleva la palma. Las animaciones a la hora de jugar se han mejorado y el colorido de los escenarios y de los personajes es notorio. Todo ello con una banda sonora a la altura que resulta menos cargante que en la primera edición y que invita a jugar durante horas. Eso sí, muchos comentarios de los usuarios apuntan a que han tenido problemas de rendimiento con terminales de gama media-baja. En nuestro caso, con un Samsung Galaxy Note 3 el juego resulta bastante fluido.
3. Arena
Una de las características que más juego nos pueden dar en Angry Birds 2 es el modo Arena. Se trata de un torneo diario que nos enfrenta a otros jugadores de todo el mundo. La dinámica es bastante sencilla, empezamos con un número de pájaros y tenemos que pasar distintos niveles con ellos. Cada vez que damos un golpe lo bastante bueno recibimos otra carta con un nuevo pájaro. El juego continúa hasta que perdemos todos los pájaros y recibimos una puntuación que nos coloca en determinado puesto en la clasificación del torneo. Eso sí, para activar este modo tenemos que llegar hasta el nivel 25 del juego (y pasarlo).
4. Varias fases en los niveles
Otro de los añadidos que aumentan la dificultad de este juego. Cada nivel cuenta con varias fases que hay que superar de una sola vez. En caso de que fallemos, aunque sea en la última fase, tendremos que comenzar de nuevo desde el principio o gastar gemas para mantenernos en esa fase.
5. Más elementos para interactuar
Por último, nos gustaría destacar la gran cantidad de elementos en la pantalla con los que podremos interactuar. Por ejemplo, en los primeros niveles tendremos unas plantas escupideras que son capaces de expulsar con violencia tanto nuestro pájaro furioso como los escombros que caigan. Éste es sólo un ejemplo de las diferentes herramientas de las que podemos echar mano para llegar a nuestro objetivo: vencer a los malvados cerdos «robahuevos».
En definitiva, un juego que sigue manteniendo un alto nivel de adicción y que resulta todavía más simpático y divertido que el anterior. Eso sí, el nuevo modo de vidas puede dejar a más de uno de los fieles de la saga con un sabor agridulce.