Las aplicaciones han demostrado ser un valor en alza. Tanto por aquellas herramientas útiles que hacen el día a día del usuario más cómodo, como por aquellas otras que simplemente son un mero entretenimiento. Y es que todo el mundo tiene un smartphone para disfrutar de estas herramientas. Pero no podemos olvidarnos de un género dentro del entretenimiento que sigue resultando sorprendente y llamativo. Son las mofas y críticas. Herramientas a modo de protesta que suelen enmascararse bajo la apariencia de un juego como sucede con Little Dictator.
No es ni más ni menos que una revisión del exitoso juego Flappy Bird que consiguió encandilar a millones de jugadores en todo el mundo durante el año pasado con su difícil mecánica, aunque esta vez protagonizado por el famoso dictador Kim Jong-Un de Corea del norte. Una sátira que llegó a los mercados de aplicaciones en relación con el supuesto ataque que sufrió la compañía Sony tras la grabación de la película The Interview (La entrevista) en la que se representa el asesinato de este líder. Un momento de tensión entre países y compañía que dio como resultado la filtración de filmes y planes del estudio, el mundial reconocimiento de la película en cuestión y, sátiras y protestas acerca de la actitud defensiva de Kim Jong-Un.
En Little Dictator se siguen las mismas mecánicas de juego de Flappy Bird. Y es que sólo hay que conseguir que este dictador atraviese el mayor número posible de puertas creadas con cohetes en vez de tuberías. Todo ello controlando el misil en el que va montado. Una fuerte crítica al alarde de potencia armada que suele hacer este dictador a través de sus canales de televisión y como propaganda política.
De esta forma, el jugador sólo tiene que pulsar sobre la pantalla con un dedo para lograr elevar la trayectoria del misil sobre el que cabalga el dictador. Si no se pulsa, éste desciende rápidamente. Con ello, y con mucho tacto, hay que controlar la altura para atravesar los huecos que dejan los cohetes situados de forma vertical. Todo ello con el único objetivo de llegar lo más lejos posible. Una misión poco menos que imposible, además de ser infinita, ya que el control de este juego es de lo más complicado, chocando por lo general a los pocos segundos de empezar la partida.
http://youtu.be/f1Rtzm8Wzp0
Eso sí, el jugador cuenta con varios potenciadores que ayudan a controlar mejor el misil o a evitar los obstáculos que se encuentran en el camino del dictador. Objetos que se pueden comprar con dinero real a través del propio juego si se quiere conseguir una gran puntuación y fardar de ella ante los amigos a través de las redes sociales.
En definitiva, un juego divertido por sus mecánicas y por el aspecto visual, que en ningún momento deja bien parado al famoso dictador. Una crítica divertida para occidente pero que no sentará muy bien a los norcoreanos. El juego Little Dictator está disponible tanto para Android como para iOS a través de Google Play y App Store.