Después de haber arrancado su andadura para ordenadores Mac, el juego de conducción Furious Driving aterriza en las plataformas móviles Android e iOS para satisfacer las necesidades de velocidad y derrapes de los jugadores. Y es que se trata de un título frenético que pone al límite la habilidad del usuario en carreras contrarreloj en diferentes entornos y ante el volante de varios vehículos para demostrar la pericia y reflejos a cada curva del recorrido.
Furious Driving es un juego de conducción centrado en carreras contrarreloj donde la habilidad del jugador al volante es la clave para terminar cada circuito. Y es que es necesario alcanzar los diferentes checkpoints o puntos de control para sumar tiempo de carrera al marcador y continuar así en el circuito hasta cruzar la línea de meta o, en su defecto, hasta que el cronómetro llegue a cero. Algo que resultaría de lo más sencillo si no fuera por el serpenteante trazado de las carreras o el tráfico existente en ellas que añaden dificultad, riesgo y emoción a cada circuito.
Basta con iniciar el juego para escoger entre cinco diferentes vehículos disponibles desde un principio, sin necesidad de desbloquearlos con pagos o mediante retos. Sólo hay que deslizar el dedo para moverse entre los supe bólidos basados en vehículos reales. Todos ellos con un detallado modelado que permite disfrutar de sus formas, reflejos sobre la carrocería y la emoción de conducir tales vehículos. Además, sólo hay que pulsar sobre ellos para cambiar la pintura de la carrocería y escoger la más afín o la que se quiera disfrutar en cada carrera. Eso sí, hay que tener muy en cuenta las prestaciones de cada uno de ellos antes de escoger el trazado a correr.
En Furious Driving el jugador puede enfrentarse a tres dificultades diferentes según el circuito que escoja. Una buena forma de empezar a entender la mecánica del juego es empezar a correr en la pista The Alps, basada en Los Alpes, donde la carretera está trazada entre montañas y un clima de invierno poco recomendable para correr. Más complicado es el trazado Downtown que se desarrolla en las calles de una ciudad con la dificultad añadida del tráfico. Finalmente es posible escoger la dificultad Profesional si se escoge el desierto de Desert Road.
Una vez en el juego el usuario sólo tiene que confiar en su pericia y sus reflejos. Y es que la jugabilidad de Furious Driving se centra en el sensor giroscopio del terminal, pudiendo girar en cada curvo con sólo voltear el terminal a izquierda o derecha. Además existen otros botones en pantalla para recolocar en el circuito el vehículo en caso de accidente o salida de pista, además del freno o el cambio de vista para conseguir una experiencia más subjetiva.
Un punto extra a tener en cuenta en este juego es que los vehículos reciben daños. Choques, arañazos y otras cuestiones que quedan reflejadas en la maltrecha carrocería y que pueden afectar a la conducción. Sin embargo es posible recoger powerups y otros objetos durante la carrera para repararlo, sumar más tiempo o incluso restarlo si son trampas.
En definitiva, un juego divertido, con un aspecto visual llamativo y trabajado que se disfruta sobre todo en el modelado de los escenarios y vehículos, y una sensación de velocidad y emoción que pocos juegos ofrecen. Pero lo mejor es que se trata de un juego completamente gratuito, pudiendo descargarlo en Google Play y App Store.