De nuevo vuelven a surgir datos acerca de la aplicación de mensajería más extendida y conocida en el mundo de los smartphones. Se trata, como no puede ser de otra forma, de la aclamada WhatsApp, que vuelve a la palestra informativa gracias a la DLD Conference (Conferencia Diseño Vida Digital en español) de Berlín, donde su cofundador Jan Koum ha ofrecido parte de la visión y estado en el que se encuentra este servicio.
De esta forma, y de boca de su creador, se sabe que WhatsApp ya ha superado los 430 millones de usuarios. Un nuevo hito teniendo en cuenta que estos últimos 30 millones de usuarios se han sumado en las últimas semanas, ya que en diciembre se conocía el dato de los 400 millones de usuarios activos al mes. Estrechamente relacionado con el creciente número de usuarios está el, cada vez mayor volumen de mensajes compartidos entre ellos, que ya ha superado los 50 mil millones de mensajes diarios. De nuevo, una cifra que crece exponencialmente si se compara con los 43 mil millones conseguidos la pasada Nochevieja, cuando de nuevo superó su propio record anual.
Este dato, además, pasa a cobrar más relevancia tras la afirmación de algunos analistas y expertos en la materia que dicen que WhatsApp estaría rivalizando con los mensajes de texto o SMS en volumen. De hecho se habla de que podrían haber superado la cantidad diaria de mensajes instantáneos enviados y recibidos frente a los mensajes clásicos. Algo que tampoco sorprende dada la expansión de la aplicación.
Y es que para Koum y su compañero Brian Acton las cosas están muy claras: la clave está en concentrarse. “Ni anuncios, ni juegos, ni trucos” es el lema de estos dos extrabajadores de Yahoo. Así, siguen apostando por la mensajería vista hasta ahora en la aplicación, sin fotos que desaparecen (en relación a Snapchat), ni juegos y herramientas adicionales que distraen de la única finalidad de WhatsApp: poner en contacto a personas desde cualquier parte del mundo de manera sencilla, efectiva y barata. Lo que no implica gratuidad, ya que la aplicación obliga al pago por la renovación anual si se quiere seguir utilizando este servicio después del año de prueba gratuito. Todo ello para evitar la publicidad y mantener un formato de negocio claro para el usuario. Aunque no ha sido muy bien recibido por todos ellos.
Además se sabe que se trata de una compañía con un reducido número de personal. Así, se ha conocido que en WhatsApp trabajan sólo 50 personas, de los cuales sólo 25 son ingenieros informáticos, y otros 20 dan ayuda y soporte a los usuarios en diferentes idiomas. Un número muy pequeño en comparación a todos los usuarios a los que da servicio esta herramienta. Siempre buscando la meta de “estar disponible en todos los móviles”, según palabras del propio Koum. Una estrategia que, visto lo visto, les ha funcionado muy bien durante estos más de tres años de vida de WhatsApp. Aunque se echa en falta nuevas funciones y compatibilidad con las tabletas. Algo de lo que Koum no ha querido comentar, al igual de su sostenibilidad económica.