La guerra entre las redes sociales de vídeo sigue su curso y, si bien Instagram parece mantenerse como ganadora inicial, Vine está muy lejos de rendirse y sucumbir. Y es que sólo un par de meses después de su lanzamiento en la plataforma Android, a la que llegó algún tiempo después de iniciar su andadura en iPhone, se ha dado a conocer que ha triplicado su número de usuarios. Un crecimiento exponencial y de lo más significativo que no sólo muestra las posibilidades de estar presente en la plataforma de Google, sino la fuerza con la que cuenta esta red social perteneciente a Twitter.
Así lo ha confirmado la cuenta oficial de Vine en Twitter, donde ha publicado un comentario dando las gracias a su comunidad de usuarios, que ya sobrepasaría los 40 millones. Una cifra que sorprende aún más si se compara con los 13 millones de personas que ya utilizaban la aplicación el pasado mes de junio, poco antes de su desembarco en la plataforma Android. Todo ello en tan sólo siete meses desde que Twitter se hiciera con esta aplicación.
Este tipo de crecimiento es habitual en las herramientas que se inician en las plataformas de Apple y se abren tiempo después a Android. De hecho, ya sucedió algo similar con la propia Instagram, aunque los tiempos y las cifras son diferentes, impidiendo su comparación. Sin embargo, sorprende el crecimiento tan rápido de Vine, incluso cuando se le daba por derrotada tras conocer las prestaciones y características de los vídeos de Instagram, con mayor duración, sus característicos filtros y una ya consolidad comunidad de usuarios, aunque ésta se centrara en la fotografía.
Aunque hay que coger esta cifra con pinzas. El dato hecho público por Vine no especifica si esos 40 millones de usuarios son en realidad usuarios activos o número de descargas, pudiendo contabilizar a aquellos usuarios que probaron la aplicación y justo después la desinstalaron sin aportar nada más. Algo que explicaría de forma más razonable este gran incremento de usuarios en tan poco tiempo.
Sin embargo, lo que no se puede negar es que, con verdaderos usuarios activos o no, la fuerza de Vine no disminuye, sino todo lo contrario. Una herramienta que sólo permite crear vídeos de seis segundos de duración con formato bucle y que no cuenta con herramientas de edición, ni filtros, ni efectos llamativos. Tan sólo la posibilidad de contar historias en un tiempo record. Algo que parece enganchar cada vez a más usuarios, premiando la brevedad en sus contenidos, y casando a la perfección con los ideales de la propia red social Twitter. Todo ello a través de una aplicación que aún está desarrollándose y añadiendo nuevas funciones y características con cada actualización, lejos de mantenerse estancada con un diseño y opciones estáticas.
En definitiva, una buena noticia para esta aplicación y para la compañía de Twitter, que parece estar logrando posicionarse con fuerza en la guerra por las redes sociales de vídeo, aunque siga siendo en un segundo puesto por detrás de la superior comunidad de Instagram.