Lo que parece ser una de las novedades del año para WhatsApp, su cambio en los términos de uso y la política de privacidad para compartir más información con Facebook, es, en realidad, un cambio de paradigma más que anunciado. Facebook lleva año gritando a los cuatro vientos que WhatsApp es una de las piedras angulares de sus servicios de mensajería y que, inevitablemente, va a fusionarse con el resto de las plataformas de la compañía, es decir, Facebook Messenger e Instagram Direct.
Estos cambios, que llegarán el 8 de febrero, permitirán a WhatsApp integrar funciones como Facebook Pay y mejorar la segmentación de los anuncios que vemos. Sin embargo, la modificación de las condiciones del servicio también se traduce en una pérdida muy importante de privacidad. Pero, ¿está todo perdido? No. En el mercado existen muchas alternativas que siguen fuera del alcance de las grandes corporaciones. Una de ellas es Signal. ¿Tiene algo que hacer frente a WhatsApp?
Signal, una solvente alternativa a WhatsApp que se centra en la privacidad
Poner a Signal frente a WhatsApp puede ayudarte a comprobar hasta qué punto es una alternativa válida. Signal es una plataforma de mensajería centrada en la privacidad, con un funcionamiento muy similar al de WhatsApp pero con características diferenciales.
En qué se parecen WhatsApp y Signal
WhatsApp y Signal tienen las siguientes similitudes:
- Su configuración. Ambas aplicaciones necesitan un número de teléfono para funcionar. Además, usan un sistema de verificación similar, mediante el envío de un código por SMS o llamada de voz.
- El contenido que se puede enviar. Signal sigue la estela de WhatsApp y permite enviar imágenes, GIFs, contactos y el punto en el que nos encontramos.
- Dispone de llamadas y videollamadas. Al igual que la aplicación de Facebook, Signal dispone de llamadas de voz y de videollamadas para mantener el contacto con tus amigos y familiares.
- Cifrado punto a punto en mensajes y llamadas. Las dos aplicaciones cifran el contenido de nuestros mensajes y llamadas.
Aunque este último punto parece igualar a ambas aplicaciones en términos de privacidad, sus diferencias evidencia que no es así.
En qué se diferencia WhatsApp y Signal
WhatsApp y Signal tienen las siguientes diferencias:
- Quién está detrás. Facebook es la propietaria de WhatsApp. Por supuesto, la idea de Mark Zuckerberg es sacarle todo el partido a dicha adquisición y, por eso, WhatsApp monitoriza todo lo que haces, con quien contactas, dónde te encuentras y mucho más. Así, es mucho más fácil segmentar la publicidad en Facebook y en el resto de sus servicios. Signal, por su parte, no hace ningún seguimiento del usuario y la empresa que la desarrolla es una fundación sin ánimo de lucro.
- Aplicación para otros dispositivos. Signal está disponible para iPad. También está disponible en Windows, MacOS y Linux (solo en distribuciones Debian). WhatsApp sigue, después de muchos años, anclada al teléfono móvil y solo ofrece una discreta versión Web que, de momento, depende de que el dispositivo principal esté conectado.
- Los datos que recopila. Signal no capta, analiza ni almacena nuestros datos. Los recientes cambios en la App Store revelan que WhatsApp conoce información muy sensible, entre la cual se incluye la situación financiera, la ubicación y nuestras compras.
El gran problema de Signal frente a WhatsApp
Lamentablemente, pese a sus grandes atributos, Signal presenta el mismo problema que el resto de alternativas a WhatsApp: no tiene una base de usuarios suficientemente grande. El uso de WhatsApp es casi un estándar en muchos países. Eso provoca que los usuarios que de verdad se preocupan por la privacidad y desean dar el salto a otras soluciones no puedan hacerlo. Actualmente, la dependencia de WhatsApp es muy alta y eso no hace más que afianzar la posición dominante de Facebook.