Las aplicaciones musicales están entre los móviles inteligentes desde el mismo momento en el que estos fueron creados. Hacer música en cualquier lugar y en cualquier momento es el sueño de muchos. Pero ¿y si no se tienen conocimientos musicales? Pues también hay herramientas para aprender. Flowkey es una de ellas, destinada a impartir clases de piano cuando y como quieras. Además va directamente a lo práctico, enseñándote posiciones de ambas manos con canciones actuales y clásicas, y esperando a que pulses la tecla correcta para continuar con la lección.
Y es que es un método que recuerda a los juegos musicales de videoconsola, donde solo se avanza cuando se toca la tecla correcta. Flowkey aprovecha el micrófono de nuestro móvil para reconocer la nota que hay que tocar en cada momento. Pasa entonces a mostrar la siguiente parte de la partitura para continuar la lección hasta que demos con la tecla necesaria. Y así hasta aprender la melodía, o el acompañamiento, o incluso ambos. Pero no es el único método de Flowkey. También permite ralentizar el ritmo de las canciones y desacelerarlas para practicar cada tramo hasta hacernos con las notas, los cambios y el ritmo correcto.
En nuestra propia experiencia ni siquiera hemos usado un piano o un teclado electrónico. Hemos aprovechado una versión digital disponible en Internet. Y nos hemos atrevido directamente con la famosa City of Stars del musical La La Land. Con pocos conocimientos de solfeo y prácticamente ninguno de piano hemos podido replicar la melodía tras unas cuantas prácticas. Primero memorizando que teclas del teclado del ordenador correspondían a las del piano y a la melodía (dificultad añadida al no usar un piano real), y después tomando agilidad e interiorizando el ritmo de la canción.
Basta con dar permisos a Flowkey para controlar el micrófono del móvil. Después, solo hay que colocar el dispositivo cerca de la fuente emisora de sonido: cerca de las cuerdas de un piano, o cerca de un altavoz del teclado. Nosotros lo hemos probado cerca de los altavoces del monitor del ordenador. Y listo. A seguir la partitura y a repetir los ejercicios hasta dominar la melodía. Práctica, práctica y más práctica.
Eso sí, Flowkey para Android no solo incluye este método de aprendizaje. Además cuenta con sus cursos para iniciarse en el mundo del piano. Desde la lectura de partituras hasta la teoría de armonías, arpegios y métrica de notas. Todo ello bien ordenado por niveles para quienes necesiten actualizar o entender las bases de la música. El único problema de estos cursos es que están en inglés. Tanto los vídeos como los textos. El formato es muy ágil y cómodo, perfecto para verlo en el móvil de camino a casa antes de practicar, por ejemplo. Pero cuenta con el hándicap de no estar adaptado a quienes no dominan la lengua de Shakespeare. Por cierto, estos cursos cuentan con ejercicios prácticos en ellos, por lo que el aprendizaje es mucho más intenso que ver simples vídeos ilustrativos.
Ahora bien, todo esto no se ofrece de forma gratuita. Al registrarnos como usuarios tenemos acceso a 8 canciones donde ser guiados por la melodía y el acompañamiento sin limitaciones. Una toma de contacto al método de Flowkey y a sus posibilidades extra. Además es posible entrar en los cursos teóricos que se elija. Pero para poder acceder a las más de 1.000 canciones y a todos los contenidos hay que suscribirse al servicio de pago. Hay varias opciones para ello: desde 20 euros al mes, hasta todo un año por unos 10 euros al mes. Incluso se puede tener acceso ilimitado para siempre por un solo pago de 300 euros.
Respecto a las canciones podemos elegir entre varios niveles de dificultad. Lo bueno es que encontramos toda clase de géneros disponibles. Desde canciones pop actuales, hasta bandas sonoras de películas e incluso videojuegos. Por supuesto, no nos olvidamos de repertorios clásicos propios de Beethoven. La variedad y la cantidad son realmente amplias y para todos los gustos.
