Si tu conexión comienza a ir más lenta de lo normal o falla de vez en cuando, es muy probable que sucedan dos cosas. O que tu router WiFi necesite ser reiniciado para que todo funcione como debería. O que alguien se haya conectado a tu red y esté acaparando el ancho de banda. Pero ¿cómo saber cuándo ocurre lo segundo? ¿Existe alguna fórmula para tener todos los detalles de estos ladrones de WiFi? Pues sí. La clave está en la aplicación Fing. Una herramienta gratuita disponible para móviles Android y para iPhone. Lo de robar WiFi se va a acabar.
Fing, un escáner WiFi
Se trata de un escáner que se encarga de rastrear todo lo que pasa en tu conexión WiFi. Algo que se puede usar para ver si a alguien le ha dado por robar WiFi. De tal forma, y desde el móvil, es capaz de conocer cuál es la red WiFi conectada y sus características técnicas. A partir de ahí rastrea todas las señales conectadas, pudiendo conocer de primera mano qué dispositivos hacen uso de la conexión. Ordenadores, consolas, móviles, portátiles, etc. Con ello puedes saber qué está conectado y activo a tu red WiFi. Y sobre todo, qué no debería estar haciendo uso de la conexión.
Su funcionamiento es sencillo y automático. Y es que es una aplicación de diagnóstico, sin que pueda llevar a cabo funciones realmente prácticas más allá de las puramente informativas. Solo hay que asegurarse de que el móvil está conectado a la red WiFi. Así, con solo activarla y esperar unos segundos, Fing se encarga del escaneo y reconocimiento.
Información detallada
Lo bueno de Fing es que muestra todos los detalles acerca de la red WiFi y de los dispositivos conectados. Incluso es capaz de detectar las redes con doble banda y unificarlas bajo la misma conexión para presentar los datos de forma sencilla al usuario. Por supuesto, los dispositivos quedan registrados con su dirección IP y MAC. Incluso permite hacer Ping para comprobar la calidad de la conexión.
Lo único que se echa en falta en esta aplicación es cortar la conexión a aquellos dispositivos no deseados. Algo que debe hacerse de forma manual, ya sea cambiando la contraseña de la conexión o expulsándoles desde los ajustes del Router.