Cómo convertir tu cara en un emoticono Emoji

Digamos que estás cansado o cansada de utilizar emoticonos Emoji. Pues ya no tienes que buscar nuevos teclados y herramientas. Ahora puedes protagonizar tus propios emoticonos. Solo necesitas la aplicación Memoji y tomarte un par de selfies. Del resto de ocupa esta divertida herramienta. Eso sí­, de momento solo está disponible para los poseedores de un iPhone.

Se trata de una aplicación de edición fotográfica automatizada. Básicamente solo tienes que tomarte un selfie para que la herramienta deforme tus rasgos como si fueras un Emoji. Así­ de sencillo. Está disponible en la App Store de forma totalmente gratuita. Es tan sencilla que cualquier persona la puede utilizar.

via GIPHY

Se tu propio Emoji

Memoji puede usar cualquier foto como referencia. Eso sí­, se recomienda que sea un selfie para que reconozca los rasgos de la persona de la imagen de forma correcta. Puede ser una foto tomada directamente a través de la aplicación, o escoger cualquiera ya tomada y disponible en el carrete del terminal. El botón de la esquina superior izquierda permite acceder a esta galerí­a para escoger la foto definitiva.

A partir de ese momento es el carrusel de la pantalla principal la que toma toda la importancia. En él se muestran diferentes expresiones Emoji clásicas. Desde lanzar un beso con corazón, hasta llorar de la risa, ser un poco malvado, estar enfermo, etc. Al elegir cualquiera de ellas la aplicación detecta los rasgos de la persona de la foto y los deforma hasta simular la expresión del Emoji.

El resultado es irreal y, en algunos casos, esperpéntico. Sin embargo, los gestos son realmente reconocibles y divertidos. Y es que nadie espera transformarse tan fácilmente en emoticono Emoji.

Memoji
Los gestos son realmente reconocibles y divertidos

Para compartir en redes sociales

Una vez seleccionada la expresión que se quiere representar, Memoji permite escoger diferentes modos de compartir el resultado. Por un lado está en foto o en ví­deo. La aplicación muestra una animación que va desde la expresión natural del selfie hasta el resultado final, lo que se muestra en el ví­deo. Pero más interesante es contar con la opción GIF. Así­, la animación queda bien representada para enviar por WhatsApp o publicar a través de Facebook, por ejemplo.