Año nuevo, móviles nuevos. O eso están intentando algunas aplicaciones de mensajería que parecen no llevarse demasiado bien con los móviles más antiguos. Y es que estar al día en materia de seguridad y privacidad, ofrecer los últimos servicios y funciones demandadas por los usuarios y lucir de forma atractiva no es posible con terminales desfasados con los que los equipos de ingenieros deben invertir muchas horas para dar gusto a muy pocos usuarios. Es lo que pasa con Telegram que, junto a WhatsApp, se suman a la moda de dejar atrás el pasado y, con él, a varios usuarios y móviles antiguos.
Telegram ha decidido dejar de ser compatible con los terminales de sistema operativo Android inferiores a su versión 4.0, también conocida como Ice Cream Sandwich. Es decir, móviles con Android 2.0 Eclair, Android 2.2 Froyo, Android 2.3 Gingerbread, y Android 3.0 Honeycomb, que en la actualidad copan el 1,4 % de cuota del mercado móvil. Una minoría que puede lastrar el avance de la aplicación de mensajería que sigue apostando por la seguridad y la privacidad de sus conversaciones.
Esta medida no se toma a la ligera, y más aún cuando puede haber usuarios perjudicados. Sin embargo, es necesaria para seguir adelante. Y es que contar con el lastre de móviles tan clásicos impide desarrollar e implementar nuevas funciones para todos. Las limitaciones técnicas de los terminales que metafóricamente peinan canas duplican el trabajo de los equipos de ingenieros de la aplicación, debiendo no solo buscar la fórmula para hacer llegar una nueva función a estos terminales antiguos, sino también asegurando su correcto funcionamiento en todos ellos. En definitiva, un sobreesfuerzo que lastra el empuje de Telegram y que hace necesario que unos cuantos usuarios que han quedado en el pasado tecnológico no puedan utilizar Telegram o recibir las últimas funcionalidades.
Cómo hacer funcionar Telegram en móviles antiguos
Ahora bien, no todo está perdido para ellos. Tal y como aclaran en su apartado de preguntas frecuentes, Telegram guarda un as bajo la manga para estos usuarios. Sin ser la solución más cómoda, sí es posible seguir siendo parte del servicio de mensajería a través de la versión web. Es decir, mediante el navegador de Internet. De esta forma, los usuarios con móviles Android en una versión inferior a la 4.0 pueden abrir Google Chrome u otros navegadores y acceder a web.telegram.org. Aquí, firmando con las credenciales de usuario, encontrarán sus diferentes chats y conversaciones grupales. Además, el servicio web de Telegram no está falto de funcionalidades para compartir contenidos o asegurar que los mensajes solo son leídos por los interesados.
Ahora bien, utilizar Telegram Web en terminales Android antiguos conlleva quedarse sin notificaciones push que alerten sobre la llegada de nuevos mensajes y una interfaz no tan cómoda como la aplicación propiamente diseñada. Es decir, un parche para el inconveniente con el que pueden encontrarse estos usuarios por la decisión de Telegram.
En definitiva, un paso adelante en la vida de la aplicación de mensajería que aún no ha dado un titular por temas de falta de seguridad. Un paso necesario que obligará a algunos a deshacerse de su antiguo móvil, aunque sea una minoría.