Tomas una autofoto o selfie y ahí están: granos, arrugas, colores descompensados, fondos que lucen más que tu propio rostro, imágenes demasiado oscuras o con demasiado ruido”¦ Retocar las fotos puede hacer de una instantánea norma, una gran foto para redes sociales. Es por ello que cada vez más aplicaciones están integrando herramientas de edición con las que cambiar algunos de los aspectos de la fotografía para que todo quede bonito y en su lugar antes de ser compartida. Una de estas herramientas es Microsoft Selfie, una aplicación de fotografía creada por la susodicha compañía, y que está disponible para los usuarios de iPhone.
Se trata de una completa aplicación de fotografía centrada principalmente en los selfies y autorretratos. Con ella el usuario no sólo toma la foto, sino que también puede retocarla para mejorar el resultado final si la pose es suficientemente buena como para no tomar una segunda captura. Filtros, posibilidad de eliminar el ruido en fotografías con poca luminosidad, mejorar el contraste y eliminar algunas de las imperfecciones de la piel y otras cualidades con las que, generalmente, las aplicaciones de cámara no cuentan.
Sin embargo, lo realmente destacable de Microsoft Selfie es todo lo que no se ve en esta aplicación. Y es que posee tecnología de reconocimiento detrás de la cámara, con la que establecer la edad del usuario retratado, su género, su tono de piel, la luz de la escena del selfie para saber, en cada caso, qué es lo que hay que mejorar y qué configuración ofrece mejores resultados.
Para ello, el usuario sólo tiene que encuadrarse y tomar la captura, como cualquier selfie habitual. Tras ello, Microsoft Selfie presenta una serie de filtros al más puro estilo Instagram, aunque con algunas diferencias notables. De esta forma el usuario puede ir comprobando filtro a filtro qué mejoras se pueden aplicar a su rostro para conseguir el resultado deseado. Por ejemplo, es posible seleccionar el filtro Boost para realizar una corrección de la exposición de la fotografía e iluminar toda la escena y, sobre todo, el rostro del usuario. Lo mismo sucede con otros filtros y opciones que el usuario puede comprobar en tiempo real.
El resultado aparece en pantalla al instante. Sólo hay que cambiar entre filtros para ver el antes y el después y asegurarse de su elección. La aplicación Microsoft Selfie no siempre da en el blanco al utilizar su tecnología de reconocimiento, lo que puede dar como resultado fotos exageradamente retocadas, con colores poco realistas o retoques que no son del agrado del usuario. Es por ello que incorpora una barra en la parte superior, junto a los filtros, con la que poder aplicar un porcentaje mayor o menor de cada ajuste, consiguiendo así el resultado óptimo en cada una de las tomas.
Tras ello ya sólo queda compartir el resultado a través de redes sociales o, si se prefiere, guardar el selfie en el carrete para ser enviado posteriormente a través de la aplicación que se desee.
La aplicación Microsoft Selfie está disponible sólo para iOS de forma totalmente gratuita. Se puede descargar a través de App Store.