No está siendo una buena época para Apple en cuanto a seguridad y privacidad se refiere. Y es que parece que en su tienda de aplicaciones han conseguido colarse varios problemas a pesar de sus medidas de seguridad, que hasta ahora tenían fama de ser estrictas pero eficaces. Así, tras el problema de las aplicaciones infectadas que estalló en China hace un par de semanas, ahora hay que hablar de herramientas que han estado robando información del usuario sin que nadie se diera cuenta. Claro que, en esta ocasión, Apple ha decidido tomar rápidas medidas para solventar el problema.
La clave de este asunto reside en la privacidad y seguridad del usuario. Características que Apple quiere preservar, y por lo que ha decidido eliminar varias aplicaciones que estaban disponibles en la App Store. Y es que se ha descubierto que algunas de las famosas herramientas capaces de bloquear anuncios de publicidad permitían la instalación de un certificado que ofrece el acceso de desarrolladores al tráfico de Internet e información cifrada del usuario. Algo que no se ha explotado en todos los casos para robar datos, pero que supone un claro riesgo para los usuarios.
De esta forma la compañía ha confirmado la eliminación de algunas aplicaciones que ofrecían la posibilidad de analizar datos como las páginas web que visita el usuario. Una información que iOS encripta y protege, pero que estas aplicaciones son capaces de saltarse pudiendo poner en jaque al usuario. Eso sí, al parecer estas aplicaciones no se utilizan para ello de forma activa, pero lo más seguro es evitar que puedan llevar a cabo estas tareas.
Mientras tanto, la compañía de Cupertino asegura trabajar con los propios desarrolladores para tratar de devolver las aplicaciones a la App Store lo antes posible. Siempre y cuando solventen esta cuestión para evitar el robo de información del usuario. Y es que muchas de ellas funcionan desviando el tráfico de Internet del usuario a través de sus propios servidores. Algo así como un bypass que permite inyectar o extraer información de dicho tráfico, en este caso evitando los anuncios de publicidad que aparecen en las páginas web o incluso en las propias aplicaciones. Así, estos servidores se encargan de desviar el tráfico y filtrarlo para comodidad del usuario, claro que pudiendo aprovechar esta característica para analizar qué es lo que ve y hace el usuario en Internet.
Con el fin de evitar un mal mayor, Apple ha tomado cartas en el asunto de forma rápida, por lo que los usuarios no deberían temer respecto a su seguridad y privacidad si usan estas herramientas de bloqueo de publicidad. Eso sí, muchas de ellas ya advierten de los riesgos de utilizar una VPN o red privada virtual para comprimir los datos o extraer la publicidad del tráfico. De momento, aquellas detectadas por Apple que contaban con el certificado que permitía a los desarrolladores el acceso a esta información ya han desaparecido, sin que sea posible descargarlas. Habrá que ver ahora cuánto tiempo pasa hasta que se consiga dar con una nueva clave para que estas aplicaciones vuelvan a funcionar en App Store.