Existe toda clase de aplicaciones tanto fuera como dentro de las tiendas oficiales de descarga. Y es que es la mejor forma de disfrutar de toda clase de contenido en el móvil, desde cualquier lugar y en cualquier momento. Y, desde luego, las aplicaciones con contenido pornográfico no iban a ser una excepción. El problema es que resulta un reclamo demasiado dulce como para no utilizar toda clase de tretas y timos por ciberdelincuentes que quieran sacar partido de ello. El último caso ha cogido por sorpresa a unos cuantos usuarios que se han visto chantajeados tras utilizar Adult Player, una herramienta de vídeos de sexo.
Según la compañía de seguridad Zscaler, quien ha descubierto el caso, la aplicación Adult Player atraería usuarios por su contenido, pero con una misión muy diferente a la de satisfacer las más bajas pasiones. Además de ofrecer vídeos porno, la aplicación tomaría el control del terminal, capturando fotografías del usuario a través de la cámara de selfies y bloqueando su móvil después. Todo ello con el objeto de extorsionar al propietario por hasta 500 dólares (más de 440 euros) si quiere poder volver a utilizar su dispositivo de forma habitual.
El problema es que para la instalación de esta aplicación hay que ofrecer ciertos permisos en el terminal Android, además de permitir a Adult Player actuar como administrador. Es decir, concederle ventajas sobre el funcionamiento básico del móvil. Un proceso del que no todos los usuarios son conscientes a la hora de instalar la aplicación. Además, no se soluciona reiniciando el móvil. Claro que, hay que tener en cuenta, que tampoco se trata de una aplicación disponible en Google Play Store, ya que su funcionamiento violaría varias de sus normas.
Si se ha topado con este problema, la compañía Zscaler recomienda reiniciar el móvil en modo seguro, que suele realizarse con una pulsación prolongada del botón de apagado y la tecla de bajar volumen (aunque puede ser diferente en distintos dispositivos). Esto consigue iniciar el móvil sin ejecutar aplicaciones instaladas. Después es necesario acceder a Ajustes, donde quitarle los permisos de administrador en la sección Seguridad. Por último sólo queda desinstalar la aplicación de forma habitual y reiniciar el terminal para que todo vuelva a su ser.
Para prevenir esta clase de problemas lo más recomendable es no instalar aplicaciones desde fuera de Google Play Store. Y es que el filtro de Google ayuda a no toparse con herramientas que resultan ser más un timo que una utilidad práctica. También hay que pensarse dos veces la instalación de cualquier contenido que pueda suponer un reclamo. Por un lado pensando en el contenido que ofrece y, por otro, poniendo mucha atención al proceso de instalación. Y es que aquí se detallan los permisos que la aplicación requiere para hacer uso de las distintas funciones del terminal. ¿Para qué querría una aplicación de vídeos tener acceso a la cámara del usuario? Además, hay que evitar ofrecer permisos de administrador a las aplicaciones, ya que, de tal forma, contarían con potestad para gestionar el móvil sin que el usuario se dé cuenta.