Desde el pasado día 29, muchos de los usuarios de Windows 7 y Windows 8 han podido actualizar sus ordenadores a la última versión del sistema operativo de Microsoft. Un proceso que trae consigo numerosas novedades, entre las que destaca la integración del asistente por voz Cortana y, sobre todo, las aplicaciones universales. Es decir, herramientas diseñadas para funcionar tanto en ordenadores, como en tabletas y smartphones con Windows 10. Pero no todo va a ser aplicaciones de mensajería, redes sociales y demás utilidades. Los juegos también están presentes, destacando entre ellos el exitoso Candy Crush Saga, que también llega a esta plataforma.
En este caso no se trata de una actualización, reconstruyendo el juego para Windows 10, ofreciendo esa característica universal para ser disfrutado en cualquier dispositivo compatible, sin importar el tamaño de su pantalla, si va acompañado de teclado o ratón, o si es un smartphone. Todo ello para disfrutar de este juego casual de puzles, caramelos, sonidos y muchos colores que sigue conquistando a millones de jugadores de todo el mundo, y ofreciendo mucho dinero a sus creadores gracias a las compras integradas.
Se trata del juego que todo el mundo ya conoce. Un título en el que Tiffi, la simpática muñeca de papel protagonista, recorre todo un universo de golosinas ayudando a todo aquel con quien se encuentra. Algo que hace a través de partidas en las que el jugador debe juntar al menos tres caramelos del mismo tipo en línea moviendo el resto de piezas del tablero. Un juego que puede parecer repetitivo y un mero entretenimiento en primera instancia, pero que se vuelve realmente adictivo e implica atención, lógica y mucha paciencia por parte del jugador.
Candy Crush Saga llega a Windows 10, además, repleto de niveles. Tanto es así que esta actualización presenta ni más ni menos que 1025 niveles de juego entre su línea principal y el modo Ensueño, donde el búho Odus toma protagonismo. Una buena colección de horas de diversión para los fanáticos que dominen todas las técnicas a la hora de crear caramelos especiales que destruyan todo el tablero de juego en apenas unos movimientos. Todo ello sin olvidarnos de los incontables enemigos como la gelatina, el regaliz o el chocolate, que harán que el jugador repita algunos niveles hasta la saciedad, quedando atrapado en alguna etapa incluso durante varios días.
Pero es precisamente en esta dificultad donde reside la diversión del título, además de su modelo de negocio. Así, quienes no puedan superar un nivel, siempre pueden hacer uso de las compras integradas para hacerse con potenciadores como el efectivo chupachups u otros poderes que ayuden al jugador en su tarea. O incluso comprando corazones para reintentar el nivel una y otra vez. Algo que también se puede solicitar a las amistades de la red social Facebook.
En definitiva, un juego incombustible que no quiere dejar a los usuarios de Windows 10 sin juntar caramelos hasta la saciedad. Así, ya está disponible para descargar desde la tienda de Windows. Es completamente gratis, aunque con compras integradas.
