Día tras días los medios de comunicación publican nuevos casos de corrupción en los que están implicados políticos y personalidades públicas que supuestamente velan por el bien de todos. Casos que indignan y que a veces resultan tan irónicos que es imposible no bromear sobre ello. Y es que el humor y la crítica política son características propias de la sociedad española, quizá por llevar tanto tiempo conviviendo con la corrupción. Por ello, no es de extrañar que surjan juegos en clave de sátira como Alcalde Corrupto. Un entretenimiento destinado a convertirse en uno de esos políticos con las manos sucias, pero con mucho humor y mucha ironía.
Se trata de un juego del género clicker. Es decir, un título donde sólo hay que pulsar repetidamente sobre la pantalla para llevar a cabo toda la acción. Pero la sencillez de su mecánica no se limita a ello, consiguiendo atrapar al jugador al hacerlo evolucionar de un político corrupto de poca monta hasta acabar involucrado en toda clase de sobornos y corruptelas de alto standing. Todo ello acompañado de referencias a casos actuales y reales que sus creadores aseguran ser sólo mera casualidad.
De esta forma el jugador empieza recaudando dinero con sólo pulsar sobre el gran billete que aparece en la parte superior de la pantalla. Poco a poco, y después de muchas pulsaciones de pantalla, se va haciendo con un botín suficiente como para invertir en ciertos negocios ilegales. Al principio es posible amañar votos y conseguir nuevos apoyos, que ofrecen ciertas cantidades de dinero cada cierto tiempo real. Tras producir más dinero, el jugador podrá invertir en prácticas más oscuras e ilegales como sobornos, obras ilegales, clubs de alterne, tabletas extraviadas e incluso la creación de aeropuertos o la compra de jueces. Prácticas que cada vez ofrecen más dinero al jugador y que le permiten engordar aún más su cuenta bancaria en Suiza. Y es que el objetivo último es conseguir amasar la mayor cantidad de fortuna posible.
Con ello, Alcalde Corrupto consigue enganchar profundizando en su mecánica de superación, produciendo cada vez más dinero y desarrollando la corruptela a nuevos niveles. Un proceso que intenta evitar la monotonía gracias a otros añadidos como las decisiones. Una opción que se activa cada cierto tiempo y que permite al jugador tomar las riendas de su carrera política. Casos que recuerdan al Prestige, donde es el jugador quien decide si empujar el barco con pérdidas de petróleo mar a dentro o hacia la costa, y que repercuten directamente sobre sus ganancias y negocios. A veces de forma positiva, aumentando beneficios, y otras de forma negativa, según la decisión. Aparte de esto hay potenciadores que permiten ampliar el valor del billete que se puede pulsar, o generando beneficios extra por tiempo limitado.
En definitiva, un juego a modo de crítica que gustará a los jugadores más irónicos por su humor. Y es que su acabado no parece completo, con falta de sonidos y una mecánica muy sencilla. Sin embargo, engancha para conocer hasta qué punto se puede estafar. Todo ello logrando títulos que se pueden compartir en las redes sociales para fardar de puntuación. El juego Alcalde Corrupto está disponible para Android a través de Google Play, y para iPhone en App Store de forma totalmente gratis.
