Las conversaciones por WhatsApp no siempre resultan en una comunicación perfecta. Y es que a las habituales faltas de ortografía o a las a veces complejas contracciones hay que sumar un mundo de problemas más. Ya sea comunicarte con una persona que no conoce las siglas y palabras que utilizas, o que se pone a los mandos de un smartphone por primera vez. Algo que acaba dando como resultado conversaciones de besugos, algunas con malentendidos, pero siempre con mucho sentido del humor y del ridículo.
O al menos eso parece de los mensajes que ha recopilado la web No Lo Creo, donde se juntan padres y mensajes de aplicaciones de mensajería. Una mezcla explosiva con divertidas consecuencias, al menos para los que pueden ver la situación desde fuera. Claro que más de una de estas conversaciones habrán sido sufridas por los usuarios de a pie. Y es que los usuarios nóveles, los padres y los abuelos que se inician en WhatsApp acaban metiendo la pata de forma estrepitosa en alguna ocasión.
Uno de los problemas más recurrentes es el autocorrector. Y es que la compañía Apple ha sido muy criticada desde los inicios de su móvil iPhone por introducir esta opción que, en muchas ocasiones, acaba siendo un impedimento más que una ayuda. Así, en vez de conseguir que el usuario escriba correctamente, el autocorrector entiende que lo redactado es erróneo, sustituyendo algunas palabras por otras que él piensa que son las correctas. Los resultados saltan a la vista. Claro que este sistema ha mejorado con los años para evitar estos problemas. Eso sí, siempre y cuando algún listillo no altere su funcionamiento para que falle adrede, como sustituir el término ropa por droga.
Otro de los grandes fallos que llevan a estas ridículas conversaciones es el uso de neologismos, siglas y frases hechas procedentes de otros idiomas. Así, cuestiones como LOL (laght out loud o carcajada), OMG (oh my god u oh dios mío) o WTF (what the fuck o pero qué narices) acaban siendo malinterpretadas y, como consecuencia, mal utilizadas en las conversaciones. Claro está que la cosa se agrava al colar un LOL en un mensaje de condolencia por un allegado fallecido. Y es que en estos casos la historia da pocas ganas de reírse a viva voz, a menos que se vea desde fuera.
En esta recopilación de imágenes tampoco faltan aquellos que se escriben antes de pensarlo. Mandar un mensaje a una persona porque se ha dejado el móvil en casa”¦ no tiene mucho sentido, pero pude darse. O incluso desconfiar de que lleguen mensajes a pesar de que el interlocutor esté contestando. Fallos humanos por dudar de la tecnología que acaban dando como conclusión simpáticas situaciones de las que es mejor reírse. Por no hablar de las ocurrentes bromas que los usuarios más graciosos gustan gastar a los más pardillos. Algo que, al menos, nos deja una buena colección de imágenes divertidas para el disfrute del resto de usuarios, aunque varios se sentirán muy identificados con algunas de estas situaciones.