Que la privacidad y seguridad de las comunicaciones son temas que preocupan a los usuarios es algo que no se le escapa a nadie. Y es que cuando una aplicación con más de 500 millones de usuarios en todo el mundo demuestra contar con vulnerabilidades, a más de uno se le eriza el vello. Es por ello que, en España, el grupo político UPyD solicitó al Gobierno el estudio de la seguridad de WhatsApp y otras aplicaciones de comunicación para conocer si defienden realmente las garantías mínimas de seguridad. Algo a lo que el Ejecutivo se ha negado.
Tras la mencionada petición en el Congreso de los Diputados, el Gobierno ha respondido a UPyD con un escrito con el que descarta pedir una investigación de la aplicación WhatsApp a la Agencia Española de Protección de Datos. Un examen que determinaría si se trata de una herramienta de comunicación segura y privada para el uso de los ciudadanos españoles. Pero el Gobierno cuenta con sus propias razones para negarse a dicho análisis.
Según el escrito, el Gobierno de España opina que, tanto WhatsApp como el resto de aplicaciones de mensajería similares, respetan la regulación actual. Así, ateniéndose a las leyes, podría decirse que se trata de herramientas de comunicación seguras y privadas. Por tanto, no sería necesario una investigación para conocer la seguridad de los datos que se comparten a través de WhatsApp y otras tantas aplicaciones más disponibles actualmente para los smartphones.
Además, añade, la Agencia de Protección de Datos cuenta con una función supervisora. De tal modo, y ante cualquier anomalía en el funcionamiento y servicio de estas aplicaciones, podría iniciar sus propios trámites para examinar la seguridad de WhatsApp, por ejemplo. Razones que les han llevado a no investigar estas aplicaciones de mensajería, a pesar de las constantes noticias acerca de las vulnerabilidades y problemas descubiertos. Cuestiones que, por otra parte, nunca han supuesto un ataque masivo para los usuarios.
Este tema acerca del estudio de la seguridad de una aplicación por parte de organismos estatales no es nuevo. De hecho, en Alemania el gobierno ha llegado a recomendar a sus ciudadanos que abandonen el uso de la aplicación WhatsApp. Y es que, en su caso, la Oficina de Regulación de la Privacidad, sí ha investigado la seguridad de los datos de esta aplicación, encontrando notables vulnerabilidades y problemas que han llevado a hacer este anuncio. Cuestiones que pueden llegar a ser alarmantes de boca de estos organismos.
La aplicación WhatsApp nunca ha sobresalido por ser la herramienta de comunicación más segura del mercado. Muchos son los casos de problemas en los que terceros pueden hacerse con datos como la ubicación o incluso información de los mensajes intercambiados. Eso sí, para ello es necesario contar con las herramientas y conocimientos necesarios, aprovechándose siempre de una conexión WiFi a la que, tanto la víctima como el ciberdelincuente, deben conectarse. Situaciones no demasiado probables y que desde WhatsApp tratan de evitar con nuevas actualizaciones de seguridad. A estos posibles problemas hay que sumar la compra de la herramienta por parte de Facebook, cuyas políticas de privacidad y estudios de los hábitos del usuario han levantado muchas ampollas. Una fama que ha llevado hasta a los políticos a querer investigar esta aplicación.
