Hace apenas unas semanas, el mundo tecnológico era testigo de una noticia sorprendente: Facebook, la red social de los mil millones de usuarios, había decidido comprar WhatsApp. Desde entonces, los rumores sobre el futuro funcionamiento de esta aplicación de mensajería instantánea no han parado de sonar. Tanto es así, que son muchos los usuarios que están preocupados por cómo este servicio empezará a almacenar datos a partir de ahora. No hay que perder de vista que hasta la fecha, WhatsApp se caracterizaba por no guardar en sus servidores las conversaciones que los usuarios mantienen a través del sistema. Lamentablemente, tras la compra de WhatsApp ni una compañía ni la otra han ofrecido detalles concretos sobre el precio o la privacidad de la aplicación. El caso es que, para dar carpetazo a esta problemática, Ene Koum, cofundador y CEO de WhatsApp, ha explicado a través del blog oficial de la compañía que el exitoso servicio de mensajería no se convertirá en un aparato de extracción de datos para Facebook.
«El respeto a la privacidad de los usuarios está codificado en nuestro ADN«, indica Koum. Es cierto que desde su lanzamiento, la plataforma WhatsApp ha hecho su piedra angular la no recopilación de datos personales y la ausencia de publicidad invasiva. Para ellos, uno de los objetivos siempre ha sido el de que las personas puedan comunicarse libremente y sin miedo. Parece que Facebook no impedirá este hecho, pero está claro que teniendo en cuenta los antecedentes y conociendo el funcionamiento de la red social de Mark Zuckerberg, no es extraño que la opinión pública se resista a seguir pensando en la inmolación de todas las premisas que hasta ahora han sido los cimientos de WhatsApp.
En el mismo comunicado, Koun ha explicado que WhatsApp no habría llegado a ningún acuerdo con Facebook si la empresa se hubiera visto obligada a cambiar una sola coma de sus principios o pautas de funcionamiento. Para el directivo, todas las informaciones que se han vertido hasta hoy en la prensa no son más que pura especulación sin fundamento. De hecho, algunos medios han indicado en múltiples ocasiones que desde su adquisición, WhatsApp se convertiría en una nueva fuente de datos personales que serían recogidos por los motores de Facebook y que servirían para dirigir nuevas tandas de publicidad a los confiados usuarios.
El CEO de WhatsApp ha aclarado que el servicio seguirá funcionando de manera autónoma y que ni en forma, ni en esencia, se producirán cambios en el sistema. Lamentablemente, hay que indicar que ni Koum ni Brian Acton (el otro cofundador de WhatsApp) son ya los propietarios de la empresa. Esto significa que dentro de cuatro años, cuando ambas compañías hayan completado las acciones previstas para la adquisición definitiva, WhatsApp podría empezar a experimentar algunos cambios que escaparán al dominio de sus fundadores.