Lo de coser un disfraz y preparar la festividad de Carnaval es toda una tradición. Algo a lo que las aplicaciones y los smartphones quieren sumarse, o al menos complementar. Y es que existe una gran cantidad de aplicaciones de edición fotográfica donde probar toda clase de efectos, máscaras y elementos sobre la imagen del usuario. Una alternativa un tanto más experimental y curiosa es la que ofrece el estudio de investigación de Microsoft y que ha llamado Face Mask.
Se trata de una aplicación de humor destinada a pasar un buen rato probando diferentes máscaras y adornos sobre los rostros y figuras de amigos y familiares. Una herramienta sin complicación alguna y que es el resultado de una investigación de Microsoft que, probablemente, se centrase en el reconocimiento de rostros. Y es que esta es la clave de Face Mask, resultando casi automática en su uso. Todo ello con posibilidades sociales a la hora de compartir el resultado y otras características que comentamos a continuación.
Para utilizar la aplicación basta con iniciarla y pulsar sobre el botón + de la pantalla principal. En este paso se insta al usuario a escoger una imagen del carrete del terminal. No importa si es un selfie o autorretrato o una foto grupal, y es que Face Mask se encarga de detectar los rostros en una imagen, aunque sean varios. Además, el usuario puede pulsar sobre el icono de la cámara para tomar una instantánea en ese mismo instante si así lo prefiere. Tras ello llega el paso divertido.
Al confirmar la imagen que se quiere decorar, la aplicación invierte varios segundos en escanear la foto en busca de los diferentes rostros presentes. Un proceso que acaba con la señalización de estos o, si es una foto demasiado oscura o movida, con el mensaje de escoger otra imagen para poder aplicar los elementos. Una vez conseguido se insta al usuario a agitar el terminal para colocar toda clase de máscaras y adornos a dichos rostros de forma automática y aleatoria. El resultado son hilarantes fotomontajes que no buscan el realismo. Tan sólo el humor de una situación absurda.
Un punto positivo es que, además de agitar el terminal, el usuario tiene la posibilidad de moverse por la barra inferior para ver los diferentes elementos disponibles en Face Mask. Así puede escoger el que desee para aplicar a la foto, moviéndolo y ajustándolo con un solo dedo para que se acople en el lugar indicado. Sin embargo, se echa en falta más opciones de edición como calibrar la perspectiva o el tamaño de los objetos con el gesto de pellizco, o superponer varios de estos elementos a la vez.
Una vez acabada la composición sólo queda pulsar sobre el icono del Disquete en la esquina superior derecha para guardar la imagen en la galería o, si se prefiere, pulsar el botón de la derecha para compartirlo a través de redes sociales como Facebook y Twitter, o guardarla en SkyDrive (Ahora llamada OneDrive).
En definitiva, una sencilla y cómica aplicación para conseguir fotografías ridículas de familiares y amigos. No sorprende en calidad o variedad, pero puede ser una curiosa distracción. Es completamente gratis. Se puede descargar desde Windows Phone Store.