El mercado de los smartphones crece, y con él, las tiendas de aplicaciones descargables. Y no sólo eso: la tendencia a adquirir aplicaciones de pago también se está instalando en los hábitos de los usuarios, cada vez menos reacios a soltar unos euros por utilidades o juegos para sus teléfonos móviles. Es por ello que los desarrolladores ven con buenos ojos echar toda la carne al asador.
En este sentido, 2011 podría presentarse como un año clave para este mercado. Tal es así, que los esfuerzos de los responsables de las aplicaciones podrían trasladarse a fórmulas de negocio que no se habrían explotado tanto en los primeros años de este sector, pero que desde este año pasarían a ser más prioritarias. Como la opción de incluir complementos a las aplicaciones, adquiribles desde dentro de la propia aplicación, marcados con sus precios.
Según la primera encuesta de Urban Airship, un 31 por ciento de los ingresos de los desarrolladores procederán de este nuevo sistema de facturación, frente al escaso ocho por ciento que representó en todo 2010. Es el factor que más crece de un año a otro, pero no el único, ya que se prevee que un 17 por ciento de las ganancias lleguen por la publicidad, subiendo un seis por ciento en comparación al año pasado.
En esta línea, sorprende que incluso las actualizaciones puedan llegar a suponer unos mayores ingresos económicos para los desarrolladores, aunque sigue siendo el factor más pequeño de beneficio, con un dos por ciento estimado para 2011, subiendo respecto al anecdótico 0,3 por ciento que se registró en 2010.
El principal medio de ingresos que se verá afectado por estas subidas será el que proceda del concepto de «branding», que si bien en 2010 supuso la segunda fórmula de ganancias, con un 33,3 por ciento del pastel, en 2011 caerá hasta el trece por ciento. En cuanto al pago inicial por aplicación, un 38 por ciento de los ingresos estarán vinculados a este medio en 2011, cuando en 2010 supusieron casi la mitad de lo que cobraron los desarrolladores.
Ya en el pasado Nokia World 2010, uno de los representantes de Rovio (empresa finlandesa, desarrolladora del popular juego Angry Birds) anunciaba que la fórmula de facturación in-app pasaría a ser uno de los pilares básicos que sostendría este modelo. Y para ilustrarlo, mostró el complemento Mighty Eagle, un enorme pájaro que nos podía sacar de un apuro, y que se puede adquirir desde el propio sistema para usarlo de forma limitada y, cómo no, previo pago.
