Los usuarios más celosos de su intimidad y privacidad quizá no quieran seguir utilizando la aplicación de mensajería WhatsApp después de las últimas informaciones conocidas acerca de este servicio. Y es que WhatsApp estaría trabajando en una nueva función destinada a compartir de forma más sencilla y directa las últimas ubicaciones del usuario. Algo que no alertará a nadie de primeras, pero sí a quienes entiendan esta función como una recopilación y guardado de las ubicaciones en las que el usuario ha estado. Una razón más para sospechar si WhatsApp está añadiendo nuevas funciones o reduciendo la privacidad del usuario.
Como suele ocurrir en las últimas semanas, esta información trasciende desde el servicio de traducciones de la compañía. Un servicio en el que usuarios voluntarios traducen frases, botones y textos que llegarán a la aplicación en próximas actualizaciones, dando pistas de estas nuevas características que traerán consigo. En este caso serán las ubicaciones o lugares recientes, de las que no se desvela más información, pero que podrían poner en jaque un aspecto más de la privacidad del usuario en esta aplicación.
Las líneas de traducción sólo ofrecen dos palabras: Ubicaciones recientes, sin que una línea de texto explique dónde se mostrarán esta función. Sin embargo, entre líneas es posible entender que estos datos serán los que el propio usuario ha compartido recientemente a través de un chat o conversación, y que mantendrán en la memoria de la aplicación (si no en sus servidores) para un próximo uso más ágil y rápido. Claro que, para ello, WhatsApp tendrá que conservar dichas coordenadas para poder reenviarlas rápidamente, si se confirma el funcionamiento de esta nueva función.
Así, parece que la aplicación de mensajería podrá recopilar información detallada del lugar desde el que el usuario comparte su ubicación. Eso sí, aún está por ver si esta función trabajará realmente de esta manera, y si WhatsApp tendrá acceso a estos datos, o sólo quedarán almacenados en el dispositivo para poder volver a compartirlos rápidamente, sin que nadie más pueda verlos. Sin embargo, cuando existe un registro de ubicaciones, quien sale perdiendo suele ser la privacidad del usuario. Y es que, en algún caso de robo de información, es posible que se dé con la forma de rescatar estos supuestos datos del terminal, siempre y cuando no se apliquen barreras de protección y de seguridad.
De momento sólo queda esperar a las próximas actualizaciones de WhatsApp para las diferentes plataformas móviles para las que está disponible, sin que se sepa aún fecha concreta o si esta función de Ubicaciones recientes estará finalmente incluida en ellas. En caso afirmativo, habrá que preguntar a WhatsApp si tendrá acceso a estos datos de lugares visitados por el usuario, y qué gestión y protección de ellos hará.
No hay que perder de vista que compartir la ubicación actual es un acto voluntario por el que el usuario decide indicar cuál es su posición más o menos exacta. Ahora bien, contener los datos de las zonas por las que se mueven los usuarios puede ser beneficioso para WhatsApp o para otras empresas relacionadas como Facebook, quienes podrán lanzar campañas publicitarias personalizadas o conocer patrones de conducta de sus posibles clientes.
