A pesar de ser la aplicación de mensajería más extendida y utilizada en todo el mundo, o precisamente por ello, WhatsApp ha sufrido toda clase de análisis, ataques y peripecias por parte de hackers y expertos en seguridad para poder captar las conversaciones de usuarios. Algo que a partir de ahora les va a resultar mucho más complicado gracias a las nuevas barreras de seguridad que esta compañía está implantando, asegurando que sólo los usuarios pueden conocer el contenido de los mensajes que intercambian.
Estas nuevas barreras de seguridad llegan de la mano de Open WhisperSystem, una compañía dedicada a crear protocolos de seguridad y herramientas de comunicación seguras a través de código abierto. De tal forma, ha implementado su experiencia y conocimientos de seguridad a través del protocolo TextSecure para las comunicaciones de WhatsApp con el fin de encriptar los mensajes de usuario a usuario (end-to-end). O lo que es lo mismo, aplicar una protección con la que ni los responsables de WhatsApp pueden saber lo que se comunica entre los usuarios. Una clave que sólo los terminales de destino conocen para descifrar los mensajes que se envían protegidos entre ellos.
Esto supone un aumento más que notable de la protección actual de las comunicaciones de WhatsApp. Y es que, según algunos medios, incluso organismos como el FBI no podrían interceptar los mensajes, mucho menos aún aquellos hackers sin los recursos ni conocimientos de los que disponen los organismos gubernamentales dedicados al espionaje. Algo que pondría a WhatsApp al nivel de otras aplicaciones de mensajería como iMessage de Apple o la tan segura y privada Telegram. Algo que los usuarios llevaban tiempo esperando.
De momento, según Open WhisperSystem, este sistema de seguridad se está comenzando a aplicar a los usuarios de la plataforma Android mediante la última actualización. Eso sí, por el momento sólo en las conversaciones individuales. Y es que han tardado seis meses de trabajo sólo para conseguir llegar a encriptar y proteger este volumen de mensajes. No hay que olvidar que los usuarios de WhatsApp generan una decena de miles de millones de mensajes al día entre los chats en grupo y los individuales. Pero siguen trabajando para expandir estas barreras a los grupos y al resto de plataformas, a los que la encriptación end-to-end llegará próximamente.
Ahora bien, también hay voces críticas acerca de la información que está trascendiendo respecto esta cuestión. Y es que, además de haber tardado mucho en aplicar verdaderas barreras de seguridad, hay quien no confía en que la encriptación de usuario a usuario sea tan definitiva como se afirma. Al menos respecto a los mecanismos de espionaje de los gobiernos. Los sistemas de inteligencia de los diferentes países cuentan con potentes herramientas capaces de recoger llamadas, mensajes y mucha otra información de los usuarios, presumiblemente siempre con una orden judicial o ante situaciones de riesgo. En cualquier caso, herramientas que seguirían siendo capaces de interceptar los mensajes de WhatsApp como ha sucedido hasta el momento.
En definitiva, una buena noticia para los usuarios de esta aplicación más celosos de su privacidad e intimidad. Y es que, al menos de momento las conversaciones individuales entre dispositivos Android cuentan con barreras nunca vistas en esta aplicación y a un nivel nunca alcanzado, teniendo en cuenta los 600 millones de usuarios de esta aplicación. Todo ello asegurándose que al menos los hackers y ciberdelincuentes ya no pueden acceder a la información que se envía por WhatsApp.
