Jurassic World Alive o Pokémon GO, ¿qué juego es mejor?

Si hace cinco años alguien nos invitase a jugar a un juego en el que es obligatorio moverse, probablemente nos habríamos reído en su cara. Nada nos hacía prever que la nostalgia o el fanatismo nos llevarían a andar más de la cuenta, elegir el camino largo o rodear zonas con tal de capturar Pokémon o dinosaurios. O simplemente recolectar pokéballs o dardos para continuar con nuestra cacería. Ingenuos… Pero Pokémon GO y Jurassic World Alive han llegado para cambiar eso. Quizá sean peligrosos, quizá sean buenos para la salud. Todo depende de la cabeza que haya tras los pulgares que lo juegan. Pero lo que sí queda claro es que los títulos sociales que nos invitan a caminar para capturar seres es un nuevo género que ha llegado para quedarse. Ahora bien ¿en cuál invertir nuestras horas y nuestros pasos? Lo intentamos aclarar en este artículo.

¿Juego acabado o juego en constante evolución?

Quienes experimentamos el mundo de Pokémon GO desde su primer día, hace ya dos años, hemos advertido la gran evolución del título de Niantic. Y es que prácticamente fue lanzado al mercado siendo un esqueleto. Una pieza sin cierre ni adorno. Un juego sin misión, ni objetivo, ni premios. Básicamente una mecánica demasiado abierta que se ha ido completando con actualizaciones y mejoras: misiones del profesor Willow, incursiones, nuevas generaciones de Pokémon, rarezas como los Pokémon shiny… Algo que ha hecho que muchos jugadores abandonen el título durante este tiempo a falta de mecánicas claras, objetivos definidos o funciones como la lucha entre entrenadores y no solo con entrenadores. Salir a capturar Pokémon y rememorar tu infancia o adolescencia estaba bien, pero no era suficiente. Por suerte lo están subsanando. Un punto a favor fue el modelado 3D de todos los Pokémon, que ha conseguido que pasemos minutos mirando sus formas más allá de los píxeles que recordábamos en Game Boy.

Game boy

En este caso Jurassic World Alive es totalmente diferente. Igual pero distinto. Y es que ha llegado al mercado como un producto cerrado y completo. Quizá no afinado y no con todo su potencial al máximo, pero sí con todo eso que le faltaba a Pokémon GO en sus inicios. Tiene una mecánica clara: crear todos los dinosaurios y mejorar los que ya se dispone. Y permite aplicar toda esta experiencia a algo más concreto: disfrutar de estos seres sobre el mundo real en Realidad Aumentada, o combatir directamente con ellos para probar tanto la astucia como la habilidad en el desarrollo de estos seres frente a otros jugadores. No cabe duda de que se han fijado mucho en Pokémon GO y en otros títulos sociales del mercado como Clash Royale. Pero este juego de dinosaurios al menos no da la sensación de estar en pañales, y el modelado y definición de sus protagonistas es de sobresaliente. De hecho la colección de seres inicial es abrumadora.

¿Tirar bolas o disparar dardos?

En Jurassic World Alive han sabido cómo imitar la fórmula pero con su propio carácter. Usan los mapas de Google para recrear nuestro entorno, llegando a mostrar las siluetas de los edificios en 3D. Todo un toque de vanguardia y detalle para quienes se fijen en estas cuestiones. Y han creado un sistema de disparo desde un dron para evitar que los jugadores creen plantillas o cuenten con un sistema esquemático para capturar ADN de los dinosaurios, como sí sucedía en Pokémon GO para asegurar el tiro con las pokéball. Es diferente, es fresco y resulta todo un reto. Es cierto que tras unos días de uso uno empieza a desarrollar sus técnicas infalibles para conseguir la mayor cantidad de ADN posible con cada disparo, pero no es una jugabilidad coja o que se pueda trucar. Todo depende de nuestra habilidad, lo que nos hayamos acercado hasta el ser y la pericia a la hora de apuntar.

disparar dardos

Lo de las pokéball es otra cosa. Algo que también ha sufrido cambios, por suerte. Y es que este gesto clásico para los que hayan jugado a los Pokémon en las consolas de Nintendo o hayan visto la serie, tenía que estar forzosamente en el juego. Al principio prácticamente daba igual qué tipo de Pokémon fuese, bastaba con lanzar la pokéball en línea recta con cierta velocidad. De ahí que se creasen plantillas para las pantallas con las que no fallar el tiro. Las bolas giradas, el movimiento de los Pokémon, diferentes tipos de bolas y otras dificultades extra se han ido implementando con el tiempo. Hoy en día es cuestión de suerte y de mucha pericia eso de capturar con puntuación excelente un Pokémon. Un auténtico reto cuanto más potente es el ser.

A la larga, los dardos pueden resultar una mecánica algo más repetitiva y aburrida. Y es que la experiencia del tiempo de desarrollo ha hecho que la mecánica de Pokémon GO sea más profunda y exigente en algunos casos. Eso sí, mucho cuidado con los dinosaurios más ágiles y pequeños, también son escurridizos.

Y una vez capturados: ¿qué hago con ellos?

Este es el verdadero hándicap de Pokémon GO. Aunque la misión de los entrenadores siempre ha sido la de “hacerse con todos”. Una vez que lo consigues o te aproximas a esta meta, es normal que pierdas todo el interés en el juego. Desde Niantic y Pokémon se esfuerzan en crear toda clase de mecánicas, eventos y fórmulas para presentar Pokémon legendarios o raros que no siempre son fáciles de conseguir en el mundo abierto. Pero una vez que los tienes, ¿Qué haces con ellos? Es aquí donde flojea el juego.

Y una vez capturados ¿qué hago con ellos?

En cambio Jurassic World Alive ha llegado con varias mecánicas extra bien pensadas para que el jugador siga disfrutando incluso cuando no está en movimiento. Y esa es la clave de este juego: los combates. Andar y capturar ADN de dinosaurios es entretenido y te abre puertas a completar la colección, pero también a la otra gran vertiente del juego: pelear contra otros jugadores.

Si te has cansado de andar o te has quedado sin dardos, siempre puedes probar suerte en las arenas de combate de Jurassic World Alive. Son combates de estrategia donde has de conocer tanto los dinosaurios como preveer sus movimientos. No es demasiado exigente, pero lo suficiente como para que no ganes todas las partidas. Este sistema de arenas nos recuerda a Clash Royale, por lo que perder combates te resta trofeos y te puede arrojar a arenas inferiores. Sin duda, todo lo que le falta a Pokémon GO para que sea un juego con sentido dentro de las casas.

Conclusiones

Hay muchos otros puntos en los que habría que entrar a debatir: eventos puntuales, combates especiales o incursiones legendarias. Premios, incubadoras y otros detalles extra que marcan la personalidad de uno y otro juego. Sin embargo, hay algo que predomina por encima de todo: el fenómeno fan.

conclusiones

No nos cabe duda de que Pokémon GO seguirá siendo la estrella ganadora por los miles de seguidores con los que cuenta. Pero nadie nos quita de la cabeza que es un producto sin hacer. Sin embargo, vemos en Jurassic World Alive cómo debería ser un juego real, completo y entretenido. La franquicia contará con menos seguidores gamers o jugones, pero disfrutarán de una experiencia mucho más completa y cerrada.

Ahora bien, no dejan de ser videojuegos. Y en ningún momento son incompatibles. Así que no dudes en disfrutar de tus paseos capturando Pokémon o combatiendo contra dinosaurios. Pero ¿Cuál es mejor para ti? Puedes dejarnos tu opinión en la sección de comentarios.