Los usuarios de WhatsApp no compartirán sus datos con Facebook, al menos de forma temporal. El traspaso de información entre compañías queda pausado ante los problemas a los que se enfrenta la red social desde que, en el mes de agosto, comenzase esta práctica. Algo que no solo no ha gustado a los usuarios, sino que también ha puesto en pie de guerra a diferentes organismos estatales de todo el continente ante la sospecha de una posible vulnerabilidad de la privacidad de los ciudadanos.
La confirmación surge desde el diario El Confidencial, donde publican un comunicado surgido directamente desde Facebook que afirma que “como resultado de nuestras conversaciones con diversos organismos durante los últimos meses, hemos pausado temporalmente en Europa el uso de datos de usuarios de WhatsApp con fines de producto o publicitarios en Facebook, para darles la oportunidad de articular sus preocupaciones y analizarlas”. Una decisión que llega pocos días después de que sucediera lo propio en Reino Unido ante las peticiones del Comisionado de Información de aquel país.
De esta manera, Facebook no conocerá los contactos del usuario, ni tendrá acceso a las fotos de perfil, las frases de estado o incluso las horas de conexión y desconexión del usuario de WhatsApp. Una información que, desde este verano, ha empezado a recolectar por motivos que no quedan del todo claro a los usuarios y diferentes organismos de protección de datos e información. Y es que Facebook afirma que todo este contenido servirá para mejorar las sugerencias de amistad en su red social, además de ofrecer publicidad mucho más relevante para cada usuario, así como mejorar otros aspectos de su servicio. Sin embargo, parece no convencer a Europa.
Facebook ya levantó ampollas en agosto tras afirmar su decisión del traspaso de información procedente desde WhatsApp con un sencillo aviso en la aplicación de mensajería. Un mensaje en el que se informaba de forma bastante vaga qué datos se recogerían y cuál sería el fin. Todo ello sin poder evitar esta cuestión, tan solo retrasándola 30 días para aceptar conscientemente el hecho. Un proceso que ha levantado la alarma de organismos en Alemania, Reino Unido o Francia, los primeros en denunciar las posibles vulneraciones que los usuarios podrían estar sufriendo ante Facebook y Whatsapp.
A pesar de que ambas compañías defendieron la idea de la independencia después de que se confirmara la compra de WhatsApp por parte de Facebook en febrero de 2014, finalmente parece que el potencial de WhatsApp no era únicamente su uso por todo el planeta, si no todos los datos de los usuarios que la utilizan (lo cual, tampoco vamos a engañar, era de esperar después de que Facebook se gastara la friolera de más de 10.000 millones de euros). Y es que los diferentes organismos de protección, como el Comisionado de Información de Reino Unido han exigido una aclaración a Facebook para saber cómo se utilizarán esos datos de forma concreta. Y más aún, cómo se recogen y almacenan.
Mientras se suceden las investigaciones y la preocupación de los usuarios, Facebook ha decidido pausar el proceso de recolección de datos desde WhatsApp, aunque el proceso ya llevaba semanas en marcha.
