lollicam

Los selfies y los ví­deos empiezan a ser formatos sobreexplotados y poco sorprendentes. Y es que redes sociales como Instagram ya están copadas de toda clase de imágenes, con mayor o menor valor artí­stico, y que empiezan a decir poco a los seguidores con más solera. Por ello surgen aplicaciones como Lollicam, capaces de dar todo un giro a estos contenidos, añadiendo pegatinas y decorados de todo tipo. Eso sí­, todo ello reconociendo el rostro del usuario para utilizar sus adornos sobre la cara del mismo, además de animarlo a su alrededor. Algo que ayuda a crear ví­deos y selfies divertidos, únicos y capaces de llamar la atención de seguidores y elevar el número de “me gustas” de las publicaciones, aunque sea sólo por originalidad.

Se trata de una curiosa aplicación que sorprende por su tecnologí­a y posibilidades. Y es que, más allá de una herramienta de edición en la que pegar stickers sobre el selfie del usuario o un ví­deo grabado desde el móvil, ofreciendo aplicar estas caracterí­sticas y decorados en tiempo real y de forma más o menos realista. Para ello cuenta con tecnologí­a de reconocimiento de rostros, algo así­ como lo que sucede en algunos móviles a la hora de tomar fotos para encuadrar caras. Así­, es capaz de conocer la posición de los rasgos del usuario y aplicar allá donde debe narices de payaso, orejas de gato, sombreros, piruletas y toda clase de complementos y efectos. Además, puede seguirlos para que estos efectos sigan ahí­ en los ví­deos aunque el usuario se mueva.

lollicam

Su funcionamiento es sencillo. Basta con iniciarla para que se active la cámara de selfies del terminal. A partir de aquí­ el usuario ha de moverse por el menú de la parte inferior (icono de carita sonriente) para seleccionar todos los elementos que desea aplicar sobre la imagen. Éstos están distribuidos en diferentes categorí­as para ordenarlos según elementos que parecen reales, divertidas pegatinas, dibujos animados, etcétera. Eso sí­, sólo algunos de estos elementos están disponibles por defecto en la aplicación, debiendo descargar aquellos que aparecen con el icono de una flecha para poder aplicarlos.

De esta forma el usuario puede escoger la decoración que prefiera y pulsar sobre el botón central de grabación. Una sencilla pulsación toma una imagen estática con aquellos que se ve, pegatinas incluidas. Aunque lo realmente divertido es crear pequeños ví­deos para mostrar las animaciones de estos elementos. Y es que Lollicam es capaz de detectar el movimiento y seguir aplicando los adornos de forma correcta. Algo que luce especialmente bien para felicitaciones, mensajes divertidos y contenidos llamativos para redes sociales. Además, tras la grabación, es posible editar la velocidad de reproducción, acelerando la animación para que resulte más divertido. Y, cómo no, pudiendo compartir el resultado final a través de aplicaciones de mensajerí­a como WhatsApp, o redes sociales como Facebook y Twitter, entre otras opciones más.

En definitiva, una herramienta divertida para dar un toque único a selfies y autoví­deos. Todo ello disfrutando de una experiencia casi automática, ya que la aplicación se encarga de reconocer al usuario y colocar el adorno donde debe y al tamaño que debe. Algo que, por otra parte, hay que ensayar, ya que no siempre se detecta a la primera el rostro del usuario, siendo necesario una buena iluminación y entorno. Además está acompañada por funciones como un retardo de disparador, la opción de aplicar filtros deslizando el dedo de izquierda a derecha, o la posibilidad de cambiar el formato de la imagen.

Lo mejor es que Lollicam está disponible tanto para Android como para iOS de forma gratuita. Próximamente contará con una tienda de contenidos donde adquirir nuevas colecciones de animaciones y pegatinas. Se puede descargar a través de Google Play y App Store.