Parece que la polémica no abandona esta aplicación. Y es que Instagram cuenta con muchos seguidores para que unos cambios en sus políticas pasen desapercibidos, más aún cuando se habla de la posibilidad de que los datos de los usuarios o sus fotos, que pasarán a ser propiedad de Facebook, puedan ser vendidas y utilizadas para publicidad sin ningún tipo de compensación económica ni de otro tipo. Cuestión que Kevin Systrom, fundador de Instagram, no ha tardado en corregir.
Todo comienza hace dos días con los cambios en las Políticas de Privacidad y en los Términos de Uso de Instagram ”“ aunque el inicio real fue su compra por Facebook por 1000 millones de dólares. Dichos cambios modificaban la propiedad de los contenidos de esta red social de retoque fotográfico. Así, sería Facebook el último responsable de todos ellos. Esto, sumado a un lenguaje poco claro de dichas nuevas políticas y al momento de incertidumbre y presión que se está viviendo con la guerra del retoque fotográfico, ha hecho correr ríos de tinta de los medios especializados alertando de los peligros o consecuencias de estas cuestiones. Una alarma social apoyada en la posibilidad de que Facebook venda las imágenes de los usuarios o la introducción de anuncios publicitarios para conseguir ingresos de esta herramienta.
Algo que no ha dejado indiferente a los millones de usuarios de Instagram, que han mostrado su malestar en la red social Twitter, donde el hastag o etiqueta #Instagram se ha mantenido como tema del momento durante estos dos días. Y es que la indignación era tal que, incluso se sucedían consejos de cómo eliminar completamente la cuenta de usuario y recolectar sus fotografías para evitar la posibilidad de que Facebook pudiera utilizarlas, ya que las nuevas políticas de Instagram no tendrán efecto hasta el próximo día 16 de enero de 2013.
Ante tal avalancha de comentarios y críticas, Systrom (Instagram), se ha visto obligado a hacer varias aclaraciones a través de una publicación en el blog oficial de la aplicación. Y es que los cambios en sus políticas podrían hacer mucho daño en una comunidad que, hasta ahora, crecía como la espuma. Por tanto, no le ha quedado otro remedio que corregir varios de los puntos más controvertidos de los Términos de Uso y de sus Políticas de Privacidad.
En cuanto a la publicidad dentro de la aplicación, Systrom confirma que los cambios realizados son para tratar de buscar un modelo de monetización que se adapte a Instagram. Y es que quieren tener margen de maniobra para experimentar con diferentes modelos, ya que Instagram nació para ser un negocio. Eso sí, no buscan introducir banners publicitarios como otras aplicaciones, sino buscar la forma menos invasiva posible, como puede ser la promoción de cuentas de marcas comerciales.
Por lo que respecta a la venta de las imágenes de los usuarios, Systom es muy claro: No es nuestra intención vender vuestras fotos. Alega, además, que se trata de una malinterpretación de los nuevos textos, y pide perdón por no haber sido más claro desde un principio. También dedica varias frases a la cuestión de que estas fotos vendidas sean utilizadas como publicidad. Algo que está totalmente fuera de los planes de Instagram, por lo que eliminarán dicha cuestión dentro de los nuevos términos.
Otro punto importante comentado en esta rectificación tiene que ver con la propiedad de los contenidos. Según Systrom, los usuarios son dueños de sus propios contenidos, algo que no ha cambiado en las nuevas políticas. Para el fundador de Instagram, es de vital importancia que los usuarios y artistas se sientan cómodos en la aplicación y sigan creando contenidos, algo por lo que seguirán trabajando.
Finalmente, también trata de aclarar que la privacidad sigue inalterable, y las imágenes que hayan sido marcadas como privadas sólo podrán ser vistas por los seguidores que se desee, como sucedía antes de los cambios.
Con todo ello, Systrom quiere agradecer los comentarios y preocupación de esta comunidad, y recuerda que las nuevas políticas entrarán en vigor en menos de 30 días, siendo su deber explicarlas y aclarar cualquier tipo de duda para que los usuarios tengan acerca de esta aplicación.
Habrá que ver si finalmente todas estas cuestiones hacen que Instagram siga creciendo y evolucionando como hasta ahora, o el peso de Facebook acaba por dar la puntilla a una aplicación que ya ha arraigado en las principales plataformas de smartphones.
